Ante posibles deportaciones de EU, en Oaxaca no hay ofertas laborales, advierte Diputado

0
191

Ignacio Martínez Platas

Oaxaca, Oax.- El diputado local, Luis Antonio Ramírez Pineda, afirmó que los impactos por la deportación masiva serían negativos para el País, ya que en lo general, México no está creciendo para ofrecer trabajos para la gente que regresa, por lo tanto, “no estamos en el mejor momento porque no hay ofertas laborales.

En entrevista, el diputado local, descendiente de mixtecos de Santa María Ayú, del distrito de Huajuapam de León, resaltó que tanto México, como Oaxaca, no se encuentran todavía organizados para una posible deportación masiva de mexicanos y Oaxaqueños.

Sin embargo, consideró que éste fenómeno migratorio es parte del desafió que tiene el gobierno federal, estatal, junto con los legisladores y con las autoridades municipales, de generar y preparar acciones y medidas que permitan atenuar y organizar el papel que deben de jugar en caso de una deportación masiva.

Reiteró, que como gobierno, como estado mexicano, “debemos de prepararnos ante la no remota posibilidad del retorno masivo de mexicanos al País”, aunque los mexicanos esperamos que no sea así”, señaló.

Los impactos, dijo, serían negativos, porque en lo general México no esta creciendo para ofrecer trabajos a la gente que se va a otros países en busca de mejores oportunidades de empleo y otro tipo de opciones laborales, el hecho de que Estados Unidos los está deportando, el País no esta en un buen momento porque no tenemos ofertas laborales.

Resaltó, que el impacto generado por el retorno masivo de indocumentados, es más social, porque de repente llegan al estado, al municipio, o a la ciudad, cientos de personas, que no cuentan con una vivienda, que tipo de servicios se les va a dar, de que van a vivir, donde van a trabajar y éste es un tema que le incumbe al estado, al gobierno.

Más adelante, explicó que el gobierno tiene como prioridad generar las condiciones para la armonía de una sociedad, por lo que su obligación será buscar cómo generar espacios para la convivencia a ese grupo de personas deportadas, es como crear una nueva colonia, una nueva ciudad que va a generar demandas de agua, viviendas, servicios, luz, infraestructura y servicios médicos.