Al promulgar la reforma financiera, el presidente Enrique Peña Nieto aseguró que con ésta se fortalecerá el sistema financiero y se logrará tener un mayor crecimiento económico.
Destacó que el objetivo es incrementar en un 15 por ciento el crédito de la banca de desarrollo, es decir que un billón 150 mil millones de pesos se destinen al financiamiento para detonar obras y respaldar proyectos productivos.
En Los Pinos, Peña Nieto dijo que la reforma financiera cumple con cuatro objetivos: impulsar la banca de desarrollo, dar certeza jurídica a las instituciones financieras, incrementar la competencia en el sector financiero y fortalecer la solidez de dicho sector.
Dijo que la reforma facilitará que los emprendedores tengan recursos necesarios para hacer realidad sus proyectos.
Aseguró que se generar condiciones para apoyar la creación de más empresas y para que las existentes crezcan y se consoliden.
Por su parte, el secretario de Hacienda, Luis Videgaray, indicó que la reforma modifica 34 ordenamientos en 12 iniciativas para hacer del crédito un “mayor detonador de crecimiento” y fortalecer el sector financiero.
Detalló que ésta se basa en cuatro ejes: mayor competencia del crédito, fomentarlo, ampliarlo y dar una mayor solidez al sector financiero.
Respecto a la competencia, Videgaray indicó que se incluyen medidas para evitar las prácticas anticompetitivas y, de esta reforma, reducir las tasas de interés.
Para ello, señaló que se fortalecen las atribuciones de la Condusef para otorgarle mayores facultades para la transparencia y la penalización de las entidades financieras que incumplan las determinaciones.