Hércules no sólo es el mejor amigo del hombre, sino también aliado de su seguridad y sana convivencia. Con una edad de dos años y ocho meses, este elemento canino ha destinado su vida entera al servicio de la seguridad pública de las y los oaxaqueños.
Integrante de la Unidad Canina de la Policía del Estado, este pastor belga malinois distinguido en su raza como uno de los más idóneos para las tareas de detección de narcóticos, guardia y protección, entrega a diario una lección de nobleza y lealtad.
“Los perros sólo reciben instrucciones de su elemento alfa, que es su entrenador y compañero” nos dice Orlando Luis Santiago, con quien Hércules conjunta el binomio hombre–canino; combinación que ha demostrado que, en tareas de seguridad, representa ventajas que escapan a las capacidades humanas e incluso aplicaciones tecnológicas.
“Recuerdo que en una ocasión, la Policía Estatal implementó un operativo conjunto con el Centro de Operaciones Estratégicas (COE) en San Dionisio Ocotepec, con la finalidad de detectar enervantes a través de tareas de inteligencia, pero al recorrer el establecimiento, los compañeros no encontraron la droga y dieron por perdido el dispositivo de seguridad, sin embargo cuando Hércules hizo su primer rastreo, detectó de inmediato la presencia de aproximadamente siete kilogramos de marihuana”, dijo Luis Santiago.
Hijo de Draga, una perra que también formó parte de la Unidad Canina y ahora se encuentra retirada, Hércules ha sido entrenado desde los primeros meses de vida por Orlando, quien le ha instruido en obediencia básica y avanzada, así como trucos de fantasía.
Hércules es muy noble y se ha distinguido por su obediencia y habilidades; aunque hace aproximadamente seis meses le fue detectado un tumor y retirado quirúrgicamente, le reapareció un par de veces más, sin embargo fue en la tercera cirugía que su estado de salud llegó a un punto crítico pero a pesar de ello, su capacidad no mermó.
“Desde cachorro ha sido hiperactivo, pero a base de entrenamiento ha sabido enfocar esa energía en beneficio de la ciudadanía oaxaqueña. La constancia es un elemento muy importante cuando se entrena un perro, especialmente un perro policía, es un proceso que nunca termina”.
Prevenir y controlar el tráfico de narcóticos o armas de fuego, detectar y someter personas sospechosas, localizar desaparecidos en zonas colapsadas o derrumbes, y rastrear cuerpos; son algunas de las funciones que realizan Hércules y otros 23 binomios que integran la Unidad Canina de la Policía Estatal.
“La encomienda de la Secretaría de Seguridad Pública está basada en anteponer todos los recursos sobre el uso de la fuerza, y la inclusión de los binomios al Operativo Cuadrante Ciudadano es muestra de ello” finalizó, Orlando Luis Santiago.