SANTO DOMINGO TONALÁ, Oax. Desde este municipio de la Mixteca, el senador del PRD Benjamín Robles Montoya se comprometió a estar vigilante de la aplicación transparente de los programas de apoyo al campo y de trabajar con los productores en la comercialización directa de sus productos, debido a que corrupción y “coyotaje” se han convertido en los mayores enemigos del campo.
En reunión con productores de calabaza de la comunidad de Yetla y luego de escuchar la problemática que afecta al sector, Robles Montoya aseguró que como representante del estado de Oaxaca exigirá a las dependencias federales y estatales el manejo correcto de los recursos públicos.
“Quiero que sepan que en mi tienen un aliado, que es mi obligación vigilar que los apoyos de los programas oficiales lleguen a quien realmente los necesitan y sin condición alguna, salvo lo que marca la normatividad. Pero con preocupación he escuchado la manera en como funcionarios públicos piden dinero a cambio de validar y aprobar proyectos y eso no lo podemos permitir, vamos a trabajar arduamente por hacer producir nuestro campo y ayudar a nuestra gente”, afirmó.
Asimismo los productores de Yetla se quejaron de los abusos de los intermediarios, los llamados “coyotes”, quienes se aprovechan de la necesidad que tienen para la venta de sus productos para evitar que se echen a perder, ya que les pagan las mercancías a precios muy por abajo del mercado e incluso por debajo del costo de producción.
Acompañado de la dirigente del Frente de Organizaciones Sociales, Campesinas, Urbanas, Pesqueras y de Transporte (FOSCUPT), Karina Barón Ortiz, el legislador federal se comprometió a gestionar recursos ante las dependencias correspondientes de apoyo al campo y al desarrollo económico, para que sean los propios productores quienes establezcan canales de comercialización óptimos.
Durante su estancia en este lugar, el senador Benjamín Robles recorrió la planta empacadora de productos agrícolas y los campos de cultivo en donde constató la excelente calidad de la producción de calabaza de Yetla, que supera por mucho los niveles de otras entidades pero que por falta de respaldo para su comercialización no ha podido tener el reconocimiento debido.