El gobierno de Estados Unidos decidió ceder el control que ejerce sobre la Corporación de Internet para la Asignación de Nombres y Números (ICANN, por sus siglas en inglés), debido a la presión internacional y el golpe producido por las filtraciones sobre espionaje dadas a conocer desde mediados del año pasado por el ex contratista de la CIA, Edward Snowden.
Este organismo, creado en 1998 por el Departamento de Comercio de Estados Unidos, es el encargado de asignar las direcciones de protocolo IP y de gestionar el sistema de dominios de la red.
Al haber sido creada por una dependencia gubernamental, el ICANN ha carecido de autonomía porque es supervisada por la Administración Nacional de Telecomunicaciones e Información que pertenece del vecino país del norte.
Lo anterior implica que el gobierno estadunidense ejerce un mayor control sobre los mecanismos de asignación de dominios, y recibe una parte de la recaudación relacionada con los registros y renovaciones.
Esto generó en otros países, particularmente la Unión Europea, un debate acerca de si Estados Unidos tiene demasiada influencia sobre la tecnología y la posibilidad de una falta de transparencia, situación que aumentó por la publicación de documentos que hizo Edward Snowden sobre el espionaje hecho por el gobierno del presidente Barack Obama a mandatarios de otras naciones y la población en general.
Para septiembre de 2015
Ante estas presiones, en un comunicado el Departamento de Comercio de Estados Unidos anunció que está dispuesto a renunciar al control que ejerce sobre ICANN una vez que termine el contrato de este organismo con la Administración Nacional de Telecomunicaciones e Información, en septiembre del próximo año.
Aunque una de las “condiciones” interpuestas por el organismo y reafirmadas por su subsecretario, Lawrence Strickling, es que el nuevo régimen esté libre de cualquier intrusión de gobiernos o coaliciones internacionales, lo que podría dejar fuera a la Unión Internacional de Telecomunicaciones que pertenece a Naciones Unidas (ONU).
Por su parte el CEO y presidente del ICANN, Fadi Chehadé, dio la bievenida a este proceso de transición que espera termine antes de septiembre de 2015, fecha en la que vence el contrato de gestión entre la empresa y las dependencias estadunidenses.
Al mismo tiempo invitó a los gobiernos, el sector privado, la sociedad civil y las organizaciones de internet a participar en este proceso para determinar cómo debe ser la administración y gobernanza de este recurso global que es internet.
“No se hará nada que ponga en riesgo la seguridad y estabilidad de internet”, dijo Chehadé.
El debate en torno a esta transición iniciará durante la próxima reunión de ICANN que tendrá lugar en Singapur del 23 al 27 de marzo.
En ocasión de 25 aniversario de la web, Tim Bernes-Lee, considerado uno de los padres de Internet, llamó a defender los derechos de los internautas.