Cuauhtémoc Cárdenas convocó a la unidad de partidos políticos, fuerzas sociales organizadas y sectores de la ciudadanía no partidista a sumar esfuerzos para realizar la consulta popular que revierta la reforma energética de Enrique Peña Nieto, en 2015. “Que la dispersión no debilite la defensa de los recursos energéticos de la nación”, señaló.
Ante miles de perredistas congregados en torno al Monumento a la Revolución, el ex candidato presidencial dijo que requieren articularse en condiciones de equidad y concretamente en torno a la “reversión de las reformas contra constitucionales 25, 27 y 28, y a la exigencia de consultas populares sin trabas ni limitaciones, respetando diversidades, sin pretender imposiciones ni de otros objetivos ni reformas de lucha”.
Se pronunció por constituir un frente o polo patriótico con esos propósitos, para fortalecer la lucha de todos.
Consideró que los partidos políticos, aquellos que hacen suya la causa de la soberanía frente a las próximas elecciones de 2015, “habrán de incluir como prioridad en sus programas electorales la reversión de esas contrarreformas, ya que, mientras mayores sean las coincidencias, más fuerza tendrán sus iniciativas y más apoyos se lograrán del conjunto de la sociedad”.
Cárdenas también dijo que con todo los medios legales y la acción legislativa a su alcance, en el tiempo que sea necesario, “seguiremos la lucha por revertir las reformas constitucionales y recuperar los textos patrióticos de nuestra norma suprema”.
Previo al discurso principal del evento, Cárdenas Solórzano, acompañado por dirigentes del PRD, encabezó una guardia en honor a su padre, el General Lázaro Cárdenas del Río.
Algunos perredistas marcharon del Angel de la Independencia al Monumento a la Revolución para sumarse a este acto, donde se reiteró el rechazo a la reforma energética de Peña Nieto.
Antes del mediodía, la corriente Izquierda Democrática Nacional realizó una concentración, bajo la misma bandera en el monumento a Lázaro Cárdenas.
Ahí, la senadora Dolores Padierna recordó que “todas las actividades y activos de Pemex en las áreas de refinación, petroquímica básica y ductos son sujetos a privatización”.
