Desde que tenía 13 años, la historia de El arca de Noé, contado en el Génesis de la Biblia, subyugó al cineasta Darren Aronofsky, quien ahora pudo darse la oportunidad de contar la historia de este profeta.
Sin embargo, lo hizo tomándose algunas licencias para poder dar vida a una cinta de dos horas, ya que el pasaje mencionado, apenas es de unos párrafos en el antiguo texto. No obstante, la polémica ha rodeado a este proyecto, el cual suscitó controversia en algunos países musulmanes, en los que se ha prohibido su difusión por considerar que contraviene los principios del Islam, en particular por la representación física de un profeta.
“No soy musulmán, pero sé que en el Islam no puedes mostrar los rostros de los profetas y él es uno de ellos y por eso creo que se prohibió. Nosotros esperamos que la gente se identifique con la cinta. Hablamos de la piedad, de la justicia, todos esos temas que están presentes en la Biblia.
Tenemos una responsabilidad con lo que creamos y la cinta apela mucho a los sentimientos humanos, trata de encontrar la bondad en nosotros. Está muy metida en la Biblia. Nada entra en conflicto con ella, aunque tiene unas diferencias. La idea era romper las expectativas de la gente, crear una nueva historia”, comentó el productor Ari Handel en entrevista durante su visita a México.
Para Douglas Booth, quien interpreta a Shem (hijo de Noé), en cierto sentido, la cinta apela a la libertad de expresión.
Es triste que distintos países no puedan ver esta cinta. Se trata de la libertad de expresión y lamento que los gobiernos de esos países no tengan la inteligencia para darle el poder a su gente de decidir si ven o no la cinta”, compartió.
Noé (Noah) relata el episodio del diluvio universal que se narra en la Biblia, aunque en esta ocasión, tanto el profeta como sus hijos y esposa, tienen voz.
“El pasaje de la Biblia es muy corto y por eso había que imaginar más cosas. Hay muchos detalles que no se leen ahí, teníamos qué pensar cómo fue su vida en el arca, qué sentían, qué pensaban. Se tenían que hacer modificaciones para poder hacer la cinta, pero no hay contradicciones en cuanto a la original, se mantiene el espíritu”, agregó Jennifer Connelly, la intérprete de la devota esposa de Noé en esta película cuyo costo fue de 160 millones de dólares.
Opinión compartida por Booth, quien aseguró, Aronofsky es un gran director con una visión muy amplia de las cosas.
“No creo que la haya cambiado nada. No hay nada que no esté en la Biblia y tomó una historia pequeña y la transformó en una cinta, y obvio tenía que agregarle cosas nuevas. Creo que Darren es un excelente director, uno de los mejores que existen hoy en día. Me agrada que el estudio se haya arriesgado a invertir 160 millones de dólares en esta historia”, dijo.
De acuerdo con Connelly, que ya había trabajado con Aronofsky y Russell Crowe (el protagonista de la cinta), fue complicado darle vida a una mujer de quien no se menciona el nombre y que además no tiene mucha presencia dentro del texto original.
“Es interesante porque leí el Génesis y realmente no había mucho. Darren la quiso plasmar como una madre devota, una esposa amante, que apoya a su marido.
Leí la Biblia por respuestas y encontré un poco de inspiración en uno de los proverbios en los que mencionaba la clase de mujer que era, cómo trabajó por su familia y creo que eso lo plasmamos en la película”, añadió.
Para Logan Lerman, el dejar a un lado a Percy Jackson, que le dio el reconocimiento a escala mundial, fue un descanso y la oportunidad de seguir creciendo como actor, para en el futuro buscar mayor diversidad en los papeles que elige.
Me encantó su visión, me encantó la historia. Se me hace una película para entretener, más allá que un filme provocador. Es una historia muy familiar con la que crecí. Me gustó interpretar a Ham y el conflicto que tiene entre lo que le dice su padre y lo que él siente, entre los ideales de su progenitor y lo que el siente que es la verdad, duda un poco de la palabra de Noé, ya que no cree que el que estén solos, sea lo mejor”, finalizó.
