“No que no, sí que sí… ya volvimos a salir”.
“No somos cinco, no somos diez… mira Gabino cuéntanos bien….”
“Gabino prometiste que todo cambiaria y resultó ser la …”
La lucha obrera se desbordó en las calles de la Verde Antequera desde las primeras horas de la mañana de éste 1 de Mayo.
“De norte a sur, de este a oeste…”, como dicta la consigna, la ciudad de Oaxaca se vio colapsada, ahogada y por momentos con una crisis de histeria colectiva por parte de automovilistas que buscaban llegar a un destino.
Son las ocho de la mañana y en el primer cuadro de la ciudad, cual día normal, es difícil encontrar un cajón de estacionamiento, hoy en la mayoría de las calles aparecieron aparcados grandes unidades de transporte, todas de la Confederación de Trabajadores de México.
Lo trabajadores “en si día” nos solo arremetieron contra el gobierno del Estado, sino también hicieron pública las diferencias y divisiones que prevalecen al interior de sus sindicatos.
Los burócratas de la Secretaría de Finanzas, portaron sendas mantas contra el líder Juan Rafael Rosas Herrera, en la cuales reprochaban su “entreguismo” al gobierno del Estado y prácticamente haber vendido al movimiento gremial.
El zócalo capitalino se convirtió en un verdadero “marchodromo”, por ahí pasaron burócratas, cetemistas, maestros, trabajadores de la secretaría de salud, que tan luego del pase de lista abarrotaron todos los “comederos” que se encuentran en sus alrededores.
Dos horas después, diez de la mañana, la situación en las calles no lograba alcanzar la normalidad; en el cruce de Cinco Señores y avenida Universidad, bloqueo.
Así Oaxaca, una ciudad abierta a la democracia, conmemoró el “Día del Trabajo”.