Miguel Ángel Aguirre Rivero, gobernador con licencia de Guerrero, anunció anoche, mediante una carta, su decisión de renunciar a su militancia en el Partido de la Revolución Democrática (PRD).
En la misiva dirigida a Carlos Navarrete, presidente del sol azteca, Aguirre Rivero expone que busca deslindar al partido de cualquier actuación que haya tenido como gobernador y ante los recientes hechos que se han vivido en el estado.
“Es mi propósito deslindar a este órgano político sobre cualquier actuación que haya tenido desde que asumí la gubernatura del estado de Guerrero”.
Además, en la carta el gobernador con licencia anunció que se pone a disposición de las autoridades federales y estatales para que se realice sobre él las indagatorias necesarias sobre cualquier hecho que se le pretenda imputar.
“Como ha sucedido desde el primer día en que solicité licencia (como gobernador) sobre los lamentables hechos acontecidos en la ciudad de Iguala”, explicó en referencia a la desaparición y muerte de los 43 jóvenes normalistas de Ayotzinapa.
Tras afirmar que no se esconderá ni saldrá del estado de Guerrero o del territorio nacional, Aguirre Rivero exigió a las autoridades que la justicia sea pareja y con estricto apego a derecho, ante lo cual enfrentará las investigaciones que sobre él se efectúe “con dignidad y entereza”.
Tras 30 años de filiación priista, el 30 de mayo de 2011, Ángel Aguirre Rivero se sumó a las filas del PRD con el principal objetivo de ser el candidato de ese partido a la gubernatura de Guerrero, la cual ganó posteriormente.
Antes de que se conociera la renuncia de Aguirre, el presidente del PRD, Carlos Navarrete, manifestó que su partido “no protegerá a nadie”.
Sobre las distintas renuncias de militantes del sol azteca en los últimos días, manifestó que ninguna de ellas le ha dolido.
El pasado 24 de octubre Aguirre pidió licencia al cargo de gobernador de Guerrero para favorecer las investigaciones de los hechos de Iguala, en los que perdieron la vida seis personas y 43 están desaparecidas.
La decisión fue dada a conocer por Aguirre en Chilpancingo, minutos antes de que la dirigencia nacional del Partido de la Revolución Democrática (PRD) emitiera un mensaje en el que aseguraba que había demandado al mandatario estatal separarse de su cargo para facilitar las investigaciones sobre la desaparición de 43 jóvenes normalistas de Ayotzinapa, ocurrida 27 días antes.
Aguirre Rivero refirió que sería el Legislativo local el que decidiera quién encabezaría la administración estatal en los próximos meses.
La renuncia de Aguirre al PRD se da horas después de la detención de su hermano Carlos Mateo, su subsecretario de Finanzas y siete personas más, entre ellas un sobrino.
Cae exsubsecretario de Finanzas
Elementos de la Policía Federal detuvieron en Acapulco, Guerrero, a Víctor Ignacio Hughes Alcocer, exsubsecretario de Finanzas y Administración de la entidad, también involucrado en un presunto fraude contra el patrimonio de la entidad.
Fuentes del Gabinete de Seguridad del gobierno federal confirmaron ayer que por estos hechos hay, hasta el momento, nueve personas detenidas, dos familiares del exgobernador Ángel Heladio Aguirre Rivero y siete integrantes de la familia de Hughes Alcocer.
Ayer se confirmó que el martes 10 de febrero, junto con el exsubsecretario de Finanzas y Administración, fue detenido su hermano, Henry Paul Hughes Alcocer, y otro de sus hijos, identificado como Víctor Felipe Hughes Acosta.
El mismo martes, el director en jefe de la Agencia de Investigación Criminal de la Procuraduría General de la República (PGR), Tomás Zerón de Lucio, confirmó la detención del hermano del exgobernador, de nombre Carlos Mateo Aguirre Rivero.
Otro presunto involucrado en el delito de uso de recursos de procedencia ilícita, por 287 millones de pesos en contra de las finanzas de Guerrero, es Luis Ángel Aguirre Pérez, sobrino del exmandatario estatal.
Los otros detenidos por estos hechos son los hijos de Víctor Ignacio Hughes, de nombre Paulo Ignacio, Mauricio Francisco, Alejandro Carlos y Jorge Eduardo Hughes Acosta.
La PGR confirmó que Víctor Ignacio Hughes Alcocer, de 63 años de edad; Henry Paul Hughes Alcocer, de 47 años y Víctor Felipe Hughes Acosta, de 37 años, fueron detenidos en la ciudad de Acapulco.
Su detención se realizó en cumplimiento de la orden de aprehensión girada por el Juez Quinto de Distrito de Procesos Penales Federales, en el Estado de México.
El grupo de nueve personas detenidas enfrentan cargos por el delito de Operaciones con Recursos de Procedencia ilícita, y todos fueron recluidos en el Centro Federal de Readaptación Social (Cefereso) número 1, El Altiplano, ubicado en Almoloya, Estado de México.
Cerebro financiero
De acuerdo con las investigaciones realizadas por la autoridad ministerial, Víctor Ignacio Hughes Alcocer, quien también fue secretario particular de Aguirre Rivero, cuando éste fue senador en el periodo de 2009 a 2011, es señalado como el cerebro financiero en el trabajo de la triangulación de los recursos de la entidad con empresas privadas.
Se indicó que por su cargo en el gobierno estatal de Aguirre Rivero, en la Secretaría de Finanzas, podría ser la pieza clave para esclarecer el desvío de los 287 millones de pesos.
Los recursos destinados para el pago de servicios y obras con otros entes públicos como CFE y Banobras eran depositados a empresas en donde los otros involucrados aparecen como representantes, apoderados legales o administradores.
Demandan aplicar ley
Coordinadores parlamentarios del PAN y PRD en la Cámara de Diputados se pronunciaron por que el país disponga hoy más que nunca de un sistema nacional anticorrupción, ante las constantes denuncias contra exfuncionarios y familiares.
Ricardo Anaya fue categórico al demandar que se apliquen sanciones ejemplares para frenar actos que afectan al erario.
“Sobre el caso de Guerrero, de confirmarse el saqueo que ha sido dado a conocer, de millones y millones de pesos, de las arcas del Estado que han ido a parar a las cuentas particulares de los familiares del exgobernador. De confirmarse ese saqueo, nosotros exigimos que se aplique todo el peso de la ley.
