La situación de las niñas, los niños y los adolescentes en el país demanda una atención especial y urgente; la desigualdad y la inseguridad inciden en la calidad de vida de los infantes.
El presidente de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) , Luis Raúl González Pérez, aseveró que la situación de las niñas, los niños y los adolescentes en el país demanda una atención especial y urgente.
Debe ser así, dijo, porque la pobreza, la desigualdad, la falta de oportunidad, de servicios suficientes y de calidad, así como la inseguridad inciden en la calidad de vida de los infantes.
“Es innegable que México es un país de leyes, el problema es que éstas no se cumplen a cabalidad”, dijo y enfatizó en la necesidad de conciliar lo dispuesto por la normativa de la materia y la realidad.
Durante la presentación del estudio “La Infancia Cuenta en México 2014”, por la Red por los Derechos de la Infancia en México (Redim), González Pérez expuso que las normas deben prever una protección integral y las problemáticas especiales que vulneran al sector.
Destacó la importancia de la reciente ley aprobada en la materia, en la que se exponen muchos de los derechos que no se le habían reconocido de manera explícita y felicitó a quienes contribuyeron para hacerla realidad, como las organizaciones de la sociedad civil, los legisladores y el Ejecutivo federal.
Ahora, insistió, el gran reto es que todos los sectores, incluida la CNDH, deben hacer realidad lo que en la normatividad se plasma, aportando lo que esté a su alcance para tal efecto.
En el Museo Franz Meyer, el ombudsman nacional remarcó en que “desatender a nuestros niños y jóvenes es actuales sean más complejos y graves en el futuro, lo que no podemos permitir ni como sociedad ni como país”, aspecto en el que la educación cobra especial relevancia.
A su vez, el presidente del Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred) , Ricardo Bucio Mújica, señaló que el informe presentó la compleja realidad que existe en todo el país para el ejercicio de derechos de niñas, niños y adolescentes y también para el acceso a bienes y servicios.
“Hay, incluso, situaciones difíciles de medir, situaciones como la restricción de libertad de movimiento que viven hoy niños y que no vivimos quienes somos hoy adultos o adultos mayores”.
Bucio Mújica señaló que vivir en un clima de inseguridad restringe la posibilidad de ejercer las libertades y que la acción de las políticas públicas tiene efectos concretos en la vida de las personas, ya sean positivos o negativos.
Sin embargo normalmente las personas que habitan en una sociedad y quienes tienen menores condiciones de autodeterminación en ella son los que más se ven beneficiadas o afectadas de las políticas públicas, que es el caso de ese sector, dijo.
A su vez, la representante de Unicef en México, Isabel Crowley, resaltó el trabajo que a lo largo de 10 años ha llevado a cabo Redim con ese reporte por una causa que une cada vez más a más personas.
“La ley establece por primera vez en la historia de México la creación de un Sistema Nacional de Protección Integral de los derechos de las niñas, niños y adolescentes, integrando también los sistema de protección que establezcan las entidades federativas a nivel local” , remarcó.
Confió en que ese modelo institucional permitirá la comunicación, coordinación y la toma de decisiones entre la Federación, los estados y los municipios, la sociedad civil y los propios niños, niñas y adolescentes, a fin de garantizar los derechos de la infancia de México.
