Vicenta García López no esta de acuerdo ni con la pena de prisión de 55 años, ni con la sanción económica por daño moral de diez mil pesos que se le impuso al asesino de su hijo de seis años diez meses de edad, Gamaliel García López.
Quien fue violado y asesinado en la ranchera Buenavista, el ocho de julio del 2011 por Julio César Ruiz Martínez
“Le compró una bolsa de Doritos, lo subió a su caballo diciéndole que lo llevaría más rápido, porque arriba de mi casa pasaba el camino.”
“Lo llevó a una casa deshabitada y ahí lo violo, asesino de nueve puñaladas y lo arrojó a un barranco, por lo que yo no lo encontraba.”
Vicenta afirma, que la jueza Betzaira Cruz Mendoza le dio al asesino, lo que en su opinión es una sentencia mínima, aduciendo que lo de Ruiz Martínez no había sido hecho con premeditación.
“El cinco de septiembre, día de la última audiencia lo señalé. Y le dije, tú conocías a mi hijo, mi hijo te llamaba amigo.”
García López, madre soltera de Gamaliel, cuenta que antes de quitarle la vida a su hijo, Ruiz Martínez salió electo por mayoría de votos como representante comunal de la ranchería Buenavista, con la encomienda de proteger y servir a sus habitantes.
Vicenta, quien afirma que por ser gente de campo, sencilla, sin palabras cultas, hay gente que no la quiere escuchar, cuenta que estuvo con la licenciada Guadalupe Hernández, por intermediación del programa televisivo de Laura Bozzo.
“Ahí me dijeron que por ser el del cabildo municipal su pena debe ser doble.”
Cuenta Vicenta y afirma, que ella no pide caridad sino justicia.
“Su familia son gente que lo quiere sacar de la cárcel o hacer más corta su sentencia.” Asegura la madre de Gamaliel y cuentas de que hubo testigos que no declararon por miedo, pues la familia de Ruiz Martínez cuenta con algunos asesinatos en su historial.
“Mi hijo no tiene precio. Yo no voy a vivir de la sangre de mi hijo, pero que la jueza haya dicho que él no lo hizo con premeditación, y haya dicho que solo tiene que pagar diez mil pesos, es una burla.”
Comenta Vicenta con la voz temblando y la psique notoriamente afectada, lo cual cuenta que ya la ha llevado a un atención psicológica que comprendió un gasto de 25 mil pesos.
García López exige que la pena económica al asesino de su hijo, actualmente encarcelado, se replantee, y que su pena se extienda a ochenta años de cárcel.
“Monstruos como él solo pueden vivir encerrados, donde no hagan daño.”
