Una disminución en los precios promedio de frutas y verduras, así como de productos energéticos provocó que en la primera quincena de abril la inflación fuera negativa en 0.45 por ciento, reportó este jueves el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Con ese registro, la inflación anual se situó en 3.03 por ciento, prácticamente en línea con el objetivo del Banco de México, que es de 3 por ciento con un intervalo de variación de un punto porcentual hacia arriba o abajo.
El descenso de 0.45 por ciento durante la primera quincena de abril en el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC), el indicador que mide la inflación, fue más pronunciado que el observado en el mismo periodo del año pasado, cuando fue negativo en 0.19 por ciento, abundó el Inegi.
Hace un año, la inflación anual fue de 3.53 por ciento.
La inflación es el aumento sostenido y generalizado de los precios de los bienes y servicios de una economía a lo largo del tiempo, según la definición del Banco de México. El aumento de un sólo bien o servicio no se considera como inflación. Si todos los precios de la economía aumentan tan solo una vez tampoco eso es inflación, apuntó.
Lo ocurrido en la primera quincena de abril es una deflación, dado que el INPC tuvo una variación negativa, respecto del periodo comparable del año anterior.
La deflación, que se presenta cuando los precios disminuyen de manera consistente por un periodo de tiempo –y no sólo por lo que ocurre en un mes– es definida por el banco central como el decremento en la tasa de inflación.
Las causas de este fenómeno, según el Banco de México, pueden ser varias, pero generalmente se asocian con reducciones en la oferta de dinero y en la demanda de bienes, aunque de igual forma, puede resultar de una mayor producción a la requerida.
En el reporte divulgado este jueves, el Inegi dio cuenta de que el precio promedio de los bienes agropecuarios disminuyó en la quincena en 1.89 por ciento, aunque en términos anuales presentaron un incremento de 5.57 por ciento.
Particularmente los precios de frutas y verduras tuvieron una inflación negativa de 2.32 por ciento en la quincena, pero un incremento de 3.55 por ciento anual.
Otro rubro que mostró una disminución fue el de los bienes agropecuarios, que en la primera quincena de abril disminuyeron 4.15 por ciento y, en términos anuales, subieron 3.20 por ciento.