El volcán chileno Calbuco acrecentó su fuerza eruptiva en la madrugada del jueves, tras permanecer inactivo desde hace casi medio siglo, con una potente columna de cenizas que cruzó a territorio argentino y provocó la suspensión de vuelos.
Las autoridades, que temen un peor escenario, informaron que hay una persona desaparecida y unas 52 albergadas. Los organismos de emergencia y las fuerzas militares apoyaban la evacuación en las inmediaciones del volcán, ubicado en el sur de Chile.
“No es descartable un escenario más complejo en las próximas horas, esto básicamente por la acumulación de lava que existe en la parte alta del volcán”, dijo a periodistas el subsecretario del Ministerio del Interior, Mahmud Aleuy.
Debido a condiciones climatológicas adversas en la zona, fue retrasado un vuelo de reconocimiento de expertos que iba a determinar con mayor exactitud cuál podría ser el comportamiento del volcán en las próximas horas.
La columna de humo del volcán alcanzaba unos 11 kilómetros de altura, con dirección hacia el noreste, acompañada de una moderada lluvia de cenizas que llevó a las autoridades a decretar alerta sanitaria en las zonas más aledañas.
Una capa de unos 10 a 15 centímetros de ceniza y piedrecillas cubría las calles cercanas.
Las cenizas afectan además a varias ciudades de la región cordillerana de Argentina, en especial San Martín de los Andes, San Carlos de Bariloche y Villa La Angostura.
“Lamentablemente, puede estar mucho tiempo en estas condiciones, es decir, semanas y meses”, dijo la doctora en vulcanología Mayra Gardeweg.
“La erupción del año 1961 duró seis semanas y la más grande que ha tenido, que no es tan distinta de esta, fue a fines del siglo XIX y duró tres años”, agregó.
La presidenta chilena, Michelle Bachelet, encabezó una reunión de emergencia en el palacio presidencial antes de viajar junto con varios ministros a la zona afectada.
Bachelet explicó que el problema “es más bien respiratorio, de inhalar esta ceniza y que pudiera generar algún tipo de problema por contaminación ambiental”.
El gobierno dispuso la entrega de miles de mascarillas en las zonas afectadas.
Brigadas de rescate se alistaban para iniciar la búsqueda de la persona desaparecida. Se trata de Waldo Flores, de 21 años, un andinista que estaba cerca del macizo cuando la tarde del miércoles inició la erupción con una columna de cenizas de unos 17 kilómetros que después se convirtió en un hongo gigantesco.
La actividad del macizo, situado en la región turística de Los Lagos, a unos 900 kilómetros al sur de Santiago, ocurre en momentos en que otro volcán del país, el Villarrica, también se encuentra en una fase eruptiva.
Las autoridades dijeron que han sido desalojadas más de 4 mil 150 personas. La preocupación de los organismos de emergencia se enfocaba en los efectos de las cenizas y en la localidad de Ensenada, a sólo 15 kilómetros del volcán.
En Argentina, zonas como Bariloche y sus alrededores, estaban igualmente afectadas con lluvia de cenizas volcánicas, sin clases escolares y vuelos suspendidos.
LATAM Airlines informó que la presencia de cenizas volcánicas afectaba la operación desde y hacia el Aeropuerto El Tepual en la ciudad chilena de Puerto Montt. Canceló cuatro vuelos en la tarde del miércoles y 10 el jueves.
En San Martín de los Andes, Argentina, la ciudad más afectada por las cenizas, la mañana parecía de noche debido a la densidad de la nube de cenizas que la cubrió.
“Son las 10:00 de la mañana y está oscuro como si fuera de noche. No se ve nada, es como una niebla muy densa, no se ve a un metro de distancia”, describió la situación un vecino.
Autos, calles y viviendas quedaron bajo una capa de varios centímetros de finas cenizas volcánicas con fuerte olor a azufre, relataron los habitantes de esta villa turística. Según señalaron, es una ceniza muy fina, tipo talco o harina, que causa un ardor muy fuerte en la garganta y los ojos.
En Bariloche, el principal centro turístico invernal de la Argentina ubicado a unos 100 kilómetros del volcán que entró en erupción el miércoles, también cayó ceniza pero la situación no era grave.
Chile tiene la segunda cadena volcánica más grande y de mayor actividad en el mundo después de Indonesia. Actualmente, las autoridades hacen seguimiento a más de 90 volcanes en el país minero sudamericano.