Líderes empresariales pidieron a los Gobiernos federal, estatal y municipal impedir que retornen al Zócalo de esta ciudad los vendedores ambulantes que respaldan el plantón de la Sección 22 de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE).
Apenas el domingo, autoridad estatal y municipal retiraró 400 puestos de comerciantes informales que permanecían en el Zócalo y Alameda bajo el cobijo de los maestros.
“Quienes nacimos, vivimos y hemos establecido nuestras fuentes de ingresos en esta hermosa ciudad, alzamos la voz para pedirle a las autoridades la liberación de estos espacios que representan el corazón de la capital y son parte del Patrimonio Cultural reconocido por la UNESCO”, exponen los empresarios en un desplegado.
El documento está firmado por los presidentes de la Asociación de Hoteles y Moteles de Oaxaca, Juan Carlos Rivera; de la Canirac, Onésimo Bravo; de la Unión de Hoteles del Estado de Oaxaca, Jaime Bautista; de la Asociación de Hostales de la Verde Antequera, Ángel Lozano; de la Unión de Guías, Pedro Torres; del Consejo Empresarial Hotelero, Carlos Ruiz, y de la Asociación de Agencias de Viajes de Oaxaca, Magdalena Victoria.
En el texto, los dirigentes del ramo turístico piden a la Sección 22 no respaldar a los ambulantes.
“Exhortamos a la dirigencia sindical de la Sección 22 del magisterio a no cobijar ni respaldar a personas o grupos que no tienen interés en cuidar la herencia histórica, arquitectónica y cultural de nuestra ciudad”.
Ayer, los comerciantes ambulantes y la Sección 22 amagaron con reinstalar los puestos en el Zócalo y Alameda a partir del próximo viernes, cuando los profesores realicen cuatro marchas a esas plazas para conmemorar el Día del Maestro.
Los líderes empresariales manifestaron su respaldo al desalojo, y adelantaron su apoyo a las acciones que tomen las autoridades federales, estatales y municipales para mantener libre el Zócalo y la Alameda de esta ciudad.
Durante nueve meses, este grupo de ambulantes auspiciado por la CNTE ha vendido mercancía ilegal en el centro de Oaxaca con el argumento de que respaldan la protesta magisterial.
Algunos de estos vendedores reconocieron que pagaron a los maestros a cambio de que les permitieran vender.
