El pasado domingo 17 de mayo se llevó a cabo, en instalaciones del Museo Belber Jiménez, el concierto gastronómico temático Fish-Nic.
Teniendo por antecedente el festejo de Día Internacional de los Museos que, se celebró en la misma sede y que tuvo por animador a la Furia con Lujuria Sonidera, familias completas, mujeres y hombres, niñas y niños de todas las edades se dieron cita para degustar una variedad de platillos y acabados culinarios que se distinguieron por su inventiva, enorme y sabrosa variedad de preparados de pescado.
“No tenemos ningún tipo de interés más allá que convivir y darle a conocer a la gente nuestra cocina.”
Comentó Eugenio Santillana, cocinero del restaurante La Toscana, quien junto con sus colegas Yannis Rojas, de Zicanda, Fermín López, de Tres Bistro y Hugo Arnaud, de Los Danzantes hablaron sobre este segundo esfuerzo emprendido por un colectivo de ocho cocineros que también incluye a los restaurantes Luvinam, El Origen, Asador Vasco y Mezquite.
Rojas mencionó que, el colectivo busca cohesionar a los comensales través de sus propuestas y que todo viene a través de una lluvia de ideas surgida de una reunión previa de sus integrantes, cuyo primer resultado fue llamo Pic-Nic, una primera muestra gastronómica destinada al cerdo, para la cual fueron donados a los ochos cocineros tres cerdos orgánicos, que cada quien los cocinó como quiso.
“La comunidad de cocineros de Oaxaca está unida, no hay celos profesionales . Se trata de divertirnos y hacer algo interesante por Oaxaca.”
Comentó Fermín López, opinión que contrastó un poco por lo vertido por su colega Eugenio Santillana.
“Más que nada el propósito es convivir nosotros, siempre en el ramo gastronómico hay mucho recelo sobre las técnicas personales y las cosas en las que cada uno intenta innovar.”
“Antes que ser cocineros, somos amigos.” Consideró el cocinero de La Toscana afirmando que la idea primigenia de este tipo de esfuerzos es la de organizar una tertulia “para compartir, para venir a divertirnos y para pasarla chido.”
Sobre el problema de volatilidad social siempre tan presente en el escenario oaxaqueño y ante la cual estos eventos suenan a ganas de encontrar nuevos caminos para la relación cliente-restaurante, Hugo Arnaud consideró.
“Es darle algo irresistible a Oaxaca, algo bueno, delicioso. Que la gente se olvide por lo menos un poco de lo que pasa en la ciudad. Abrir estos espacios es también abrir los ánimos, despejar esas energías que pueden estar plagadas de pura negatividad.”
Arnaud hizo notar que Fish-Nic (al igual que su antecedente Pic-Nic) es un esfuerzo con fines integracionales , con todas las mesas colocadas juntas y palmo a palmo, sin distinciones.
“Mucha gente sale de aquí con nuevos amigos, nuevos conocidos.”
Los cuatro cocineros coincidieron en que esperan que los comensales los sigan apoyando y que estos bufetes gastronómicos temáticos se conviertan ya en un referente para el comer y pasarla bien en Oaxaca.