La construcción del proyecto del Centro Cultural y de Convenciones de Oaxaca (CCCO) cumplió con el procedimiento de evaluación en materia ambiental estatal, por lo que la realización de esta importante obra de ninguna manera contraviene a las disposiciones estatales y municipales de cuidado ambiental, debido a que se han acatado a cabalidad con todos y cada una de las disposiciones normativas en esta materia.
Lo anterior fue señalado por la Directora del Instituto Estatal de Ecología y Desarrollo Sustentable (IEEDS), Helena Iturribarría Rojas, al informar que a través del expediente 3S.1.2.7/DCCIA/069/2014, el Gobierno del Estado de Oaxaca concentra la autorización condicionada correspondiente para la realización del CCCO, y que dispone la Manifestación de Impacto Ambiental.
La funcionaria estatal precisó que el IEEDS está facultada para evaluar el impacto ambiental de las obras o actividades susceptibles de causar desequilibrios ecológicos, por lo que la dependencia a su cargo evaluó y autorizó de manera condicionada la construcción del CCCO en materia de impacto ambiental, al tratarse de una obra pública estatal.
Por ello, recordó que con fecha 15 de diciembre de 2014, personal del IEEDS realizó un recorrido al predio donde se construye la obra, con el objeto de verificar información contenida en la Manifestación de Impacto Ambiental, emitiendo posteriormente el Dictamen Técnico, donde se señala que el sitio propuesto para realizar el proyecto se encuentra fuera de la poligonal declarada como Área Natural Protegida.
Iturribarría Rojas precisó asimismo que el Gobierno de Oaxaca solicitó la Opinión Técnica de Riesgos por Inestabilidad de las laderas del Cerro del Fortín -elaborado por el Servicio Geológico Mexicano- así como el Estudio Geotécnico para la Determinación de la Cimentación del CCCO, Estacionamiento y Plazas; el Reporte de Factibilidad para el predio asignado para la construcción del CCCO, emitido por la Coordinación Estatal de Protección Civil –y por último- el Inventario de Vegetación y Avistamiento de Fauna Silvestre.
Comentó que durante la evaluación del proyecto se determinó que la construcción del CCCO se encuentra fuera de la Zona de Reserva y Área Natural Protegida, decretada el 14 de noviembre de 1992, así como del Parque Estatal “Cerro del Fortín”, decretado el 14 de agosto de 2004.
La titular del IEEDS añadió que los impactos ambientales fueron considerados en la Manifestación de Impacto Ambiental presentada por el Fideicomiso para el Desarrollo Logístico del Estado de Oaxaca y evaluados por el IEEDS, estableciendo al respecto las condicionantes necesarias para prevenir, mitigar, reparar o compensar dichos impactos.
Para ello, FIDELO elaboró el Programa de Seguimiento de la Calidad Ambiental, el que se sistematizan y calendarizan la ejecución de los términos y condicionantes establecidos en la autorización, y el cual es supervisado por el IEEDS.
Adicionalmente, la autorización condiciona acciones de mitigación y compensación que se realizarán en el “Parque Estatal Cerro del Fortín”, como la reforestación en una superficie de más de 41 mil metros cuadrados, la cual incluye prácticas de retención de suelos, captación de agua, establecimiento de señalética informativa y restrictiva.También la restauración de cercado perimetral del parque y el monitoreo permanente de las actividades que se llevan a cabo para cuidar el entorno ecológico de la zona.
Comentó que el Municipio de Oaxaca de Juárez emitió la Licencia de Construcción, así como las Autorizaciones de Poda, Derribo con Sustitución, Trasplante y Derribo por Construcción, tanto para el área del Centro de Convenciones como para el estacionamiento, estableciendo la compensación por el derribo y poda de árboles con 900 individuos de importancia biológica para la región, así como el rescate, trasplante y reubicación de 319 árboles, que por sus características fitosanitaria garantizan mayor porcentaje de sobrevivencia.
Mencionó que independientemente de éstas condicionantes, se consideró también un sistema de tratamiento para las aguas residuales; manejo integral de residuos sólidos -a través de la separación y acopio- control de emisiones de polvo y gases de combustión, así como la reforestación de áreas verdes dentro del proyecto en una superficie 12 mil 602 metros cuadrados.
La directora del IEEDS señaló que la manifestación de impacto ambiental fue elaborado por un despacho especializado en la materia.
Finalmente, precisó que el Instituto cuenta con facultades para inspeccionar y vigilar que las actividades se desarrollen de conformidad con los términos y condicionantes de la autorización y en caso de presentarse impactos o riesgos, que por su naturaleza no permitieron ser identificados en el estudio o que pretendan realizar modificaciones al proyecto, el estudio de impacto ambiental será evaluado nuevamente por el IEEDS, requiriendo la información necesaria para subsanar los impactos no previstos.