En vísperas del cierre del plazo para la impugnación a nivel distrital de las elecciones federales pasadas, los partidos Acción Nacional (PAN), de la Revolución Democrática (PRD) y Morena se aprestaban a interponer sus inconformidades, donde existía un común denominador: Oaxaca.
En todos los casos, los comicios en los distritos 2 de Teotitlán y 7 de Juchitán se impugnarían toda vez que se instaló apenas 40 por ciento de las casillas.
De proceder los recursos ante el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) y anularse ambas elecciones, su repercusión podría afectar la integración de la Cámara de Diputados porque, entre otros aspectos, podría favorecer que el Partido del Trabajo (PT) alcanzara 3 por ciento de la votación total y en consecuencia preservar su registro como partido político.
Aunado a ello, Morena analizaba presentar recursos en la totalidad de los 160 distritos que ganó la coalición PRI-PVEM, por considerar que los ecologistas incurrieron en actos anticipados de campaña, rebase de topes de gastos y otras irregularidades denunciadas a lo largo del proceso electoral. En tanto, al cierre de esta edición el Partido Revolucionario Institucional (PRI) aún analizaba los recursos que podrían promover.
Un común denominador en las impugnaciones es la estrecha diferencia a favor o en contra de un partido. En el caso de Acción Nacional (PAN), hasta anoche se preparaban recursos en los estados de Nuevo León, Puebla, Veracruz, estado de México, San Luis Potosí, Guanajuato y Colima.
En cuanto al partido del sol azteca, además de los dos distritos de Oaxaca, preparaba otros ocho recursos más. Aunque el cómputo arrojaba el triunfo perredista, el margen fue muy estrecho. Asimismo, presentarían recursos de queja en el distrito 5 del estado de Morelos, 7 y 9 de Michoacán, 3 de Guerrero, y 1, 13 y 14 del Distrito Federal.