El Centro de Derechos Humanos y Asesoría a Pueblos Indígenas (Cdhapi) requirió a laProcuraduría General de Justicia del estado (PGJO)investigue el homicidio de Martimiano González Roque, de 13 años de edad, asesinado a balazos en el municipio de Santiago Amoltepec, en la Sierra Sur.
El presidente del Cdhapi, Maurilio Santiago Reyes informó que el niño murió víctima de varios impactos de arma de fuego que recibió en la espalda cuando se dirigía a realizar tareas de limpieza en la parcela familiar, en un paraje de Amoltepec.
Al crimen de Martimiano se suma el de Juventino Pérez Velasco de 11 años de edad, ocurrido el 22 de mayo del 2014, en el paraje El Mamey, en Amoltepec, Sola de Vega.
Un año antes, el 10 de septiembre de 2013, Jonatán Santos Girón de 10 años fue asesinado de un balazo en la cabeza cuando se encontraba en la azotea en su domicilio en Amoltepec.
La organización civil defensora de los derechos humanos, con sede en la ciudad de Tlaxiaco, tiene documentados 20 homicidios en el municipio mixteco de Amoltepec, cometidos en contra de mujeres y niños.
El defensor pidió a los gobiernos federal y estatal, cumpla con las recomendaciones del Comité de Derechos de los Niños de la ONU e investigue las denuncias de muertes violentas de los niños y niñas, de manera expedita y exhaustiva y que los autores sean llevados ante la justicia.
A las instancias del estado pidió para las familias de las víctimas apoyo psicosocial y que sean compensadas de manera adecuada.
Los derechos de las niñas y los niños son sistemáticamente vulnerados y tal situación propicio que el 5 de junio de 2015, el Comité de los Derechos del Niño de la ONU, hiciera las siguientes observaciones al gobierno mexicano.
Tomar medidas urgentes para prevenir las muertes violentas, los asesinatos y las desapariciones de niñas y niños y sus padres y madres, incluyendo un análisis de las causas de estos actos violentos, como lo son la violencia armada, el crimen organizado, el tráfico de drogas, la desigualdad de género, la pobreza y la marginación.