Trabajadores del Centro Histórico piden limpieza y orden en el Zócalo

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Reconociendo las libertades de trabajo y expresión, como también la no represión, trabajadores de establecimientos comerciales ubicados en el Centro Histórico, pidieron al gobierno del estado dar respuesta a estos grupos que se encuentran instalados en el zócalo, los cuales dan una mala imagen a la ciudad.

 

 

A un año de haberse instalado el plantón del magisterio, indicaron, en el zócalo de la capital priva el desorden, como también la insalubridad y la falta de seguridad para quienes visitan esta zona, por lo que exigieron al gobierno estatal les retire, realice la limpieza del lugar y brinde las garantías para que el turismo disfrute su estancia en nuestra capital.

Al menos 600 trabajadores de comercios ubicados en el Centro Histórico, se dijeron afectados ante la tibieza de las autoridades estatales y municipales, para liberar el zócalo de la capital oaxaqueña, espacio que ha sido dañado por las organizaciones sociales que a diario se manifiestan en Oaxaca.

“Hay suciedad, huele a orines, hay vagos y delincuentes, por ello es urgente que el gobierno del Estado actúe, no pedimos un desalojo, pero si un espacio digno en el que se pueda ofrecer atención a los visitantes”.

En ese sentido y de cara a las festividades de los Lunes del cerro, los trabajadores manifestaron que es necesario tener la certidumbre que el zócalo estará limpio, al tiempo que urgieron a los gobiernos estatal y municipal, para que hagan su trabajo y así pueda garantizar los empleos de la clase obrera del Centro Histórico.

“Los patrones nos están mandando a descansar de dos a tres días al mes sin goce de sueldo, lo que sin duda afecta a nuestras familias”.

Recordaron que desde el 25 de junio de éste año iniciaron reuniones con al área de Valles Centrales de la Secretaría General de Gobierno (Segego) a cargo de Rodolfo Quintero, sin embargo hasta la fecha los autoridades no han dado solución a las demandas que contemplan el retiro de los maestros, la limpieza del Zócalo y una ciudad libre de ambulantes y delincuencia.