El procurador de Michoacán, Jaime Rodríguez Aguilar, afirmó que tras concluir los peritajes y la averiguación previa, se descarta que militares hayan sido los responsables del asesinato del niño Edilberto Reyes García y de cuatro lesionados más, ocurrido el pasado 19 de julio en la población nahua de Ixtapilla, municipio de Aquila.
En conferencia de prensa celebrada en Casa de Gobierno, el funcionario federal afirmó que tanto los cuerpos de seguridad como los propios habitantes fueron agredidos por personas desconocidas, ya que se utilizaron calibres distintos a los que usan los militares.
Dijo que en el restaurante conocido como Costa de Michoacán se encontraron seis impactos de bala, una de estos impactos ocasionó la muerte del niño Edilberto. Incluso el soldado Gregorio Hernández presentó una herida de bala similar a la del niño.
Familiares del menor y personas que se encontraban en el restaurante donde Edilberto fue a comprar un pañal, aseguraron que vieron a los militares disparar.
Dos de los lesionados que se encontraban fuera del local afirmaron que observaron pasar el convoy militar, después de tener un encuentro violento con piedras y palos en contra de los comuneros que se encontraban a unos 100 metros, en el puente donde se encontraba el bloqueo, y pudieron ver que los disparos fueron de los soldados.