“Hoy el grupo más importante de rock en México son Los Ángeles Azules”.
Ali Gua Gua sonríe perniciosa ante su propia provocación. Esta en Oaxaca para presentarse en el Txalaparta Bar, se da un momento para dar una entrevista antes de probar el equipo con el que tocara esta noche.
La DJ e intérprete habla sobre las Kumbia Queers, el grupo de tropical punk, integrado por seis mujeres, y que viera la luz en el Buenos Aires del 2007, a raíz de la unión de Ali con She Devils y Juana Chang.
“Empezamos a hacer covers de grupos de rock, porque no sabíamos tocar cumbia. Canciones que tratábamos de encumbianchar, siempre muy en serio. Con humor, pero tratando siempre de tocar muy bien nuestros instrumentos”.
“Ya luego vino el fenómeno de la cumbia chistosita”.
Se le ha preguntado a Gua Gua que opina de aquellas voces que señalan a la cumbia como un género menor que no se debe ser mezclado con el rock.
“La cumbia es la reina de Latinoamérica, de la calle. Me llamaba la atención al tocar cumbia que muchos rockeros la minimizaban por una cuestión de clase social. Me divertía mucho ver como ciertos rockeros estaban ahí tratando de hacer menos a los cumbieros”.
“La cumbia es algo muy importante que está en nuestra sangre y sólo hasta ahorita nos la empezamos a tomar más en serio”.
Para Ali Gardoqui de la Reguera, nombre con el que fue bautizada al nacer, toda la música entra en su gusto personal.
“Un actor no va a ser solo comedias o películas de horror toda su vida. Me gusta no encasillarme Como DJ trató también dentro de la medida de lo posible, tocar un poco de todo”.
Gardoqui declara que para la “dijereada” gusta de agarrar una influencia muy latina, asegura que le importan mucho que las cosas que toca estén en español.
“Reivindicar un poco, aunque suene mamón, nuestra cultura que está de poca madre”.
“Siempre miramos los ojos a otros lados, pero afortunadamente hoy se está consolidando una revalorización de nuestros propios elementos”.
Gua Gua se va entonces un poco más para atrás, y habla sobre Las Ultrasónicas, el grupo de tres mujeres que hacían canciones sobre venirse en su boca y sobre perdonar a pobres pordioseros.
“Con ellas la puerta siempre se quedó abierta, nunca dijimos que dejábamos de tocar, pero sentíamos que ya era otro tiempo para el rock, que necesitábamos cosas nuevas y cada quien se clavo a sus propios proyectos”.
Se le pregunta sobre el uso que de la sexualidad hacia este grupo surgido en 1996, y que en su alineación más característica tuvo a Jenny Bombo en la batería y en la voz, a Jessy Bulbo en el bajo y a Gua Gua en la guitarra.
Ali aclara antes de entrar en más detalles que antes que nada para ella “la música y el baile son sexo en vertical”.
“En su momento la banda se escandalizó con nosotras porque éramos mujeres y no había otro referente con quien compararnos”.
“Algunos periodistas nos decían que éramos como Paquita la del Barrio, y decíamos, ¿te cae? Ella tiene cuarenta años mas que nosotras”.
Ali atribuye estas comparaciones al hecho de que hay muy pocos modelos femeninos en la música, donde tienes que ser un monstruo, tipo Janis Joplin o Joan Jett
“Siempre que las mujeres expresan sus sensualidad hay una tendencia a llamarlas putas. Las personas no estaban acostumbradas a ver una mujer que no se encuerara en un escenario”
“Antes de las Ultrasónicas, grupo que tenía una bajista mujer era considerado una revolución”.
Gua Gua observa que existían grupos de rock de varones que decían cosas realmente denigrantes contra las mujeres, de las que los más persignados acusaban a las Ultrasónicas de dirigir contra los hombres.
“Como el caso de la canción de La Planta, del grupo Caos , o las canciones de José Alfredo Jiménez, donde la mujer es lo peor, la traidora, la ingrata”.
“Unas mujeres hacen una canción (Que grosero) que realmente no dice nada contra los hombres . Y entonces la gente no lo puede procesar”.
Se le pregunta a Gua Gua su opinió sobre lo que están haciendo sus excompañeras, como Jessy Bulbo y su todavía reciente protagónico en la cinta El lenguaje de los machetes, de Kyza Terrazas.
Ali se pone económica y responde que Kyza es su cuate, pero que a la película no la ha visto, y le da gusto que a sus antiguas socias les este yendo bien.
Gua Gua está presentando en Oaxaca su debut solista, Forever Alone, el cual surgió hace un año y medio en el Resista tour que emprendió con la rapera argentina, Miss Bolivia, con quien tambipen comparte escenario está noche
“Son doce temas. El lado A es mas rockero y el lado B es mas hip hop- cumbia electrónico”.
El disco es producido por Silverio, músico experimental, progresivo y suigeneris, ex integrante de Titán, y quien alguna vez casi termina en una cárcel oaxaqueña cuando se le ocurrió quedarse en calzones rojos en una especie de magna posada navideña y familiar.
“Él ayudó con los teclados y añadiendo algunas cosas. Pero yo soy la que toca la batería, el bajo, al guitarra , programó, cantó y compongo casi todas las canciones”.
Forever Alone es una especie de disco multidisciplinario resultado del gusto de su autora por la mezcla. “Un disco anti genero que va por mucho lados en lo musical y en la lirica”.
Hay un ingrediente siempre lúdico en tus proyectos musicales, como de no tomarte a ti misma demasiado en serio.
Se le comenta a la entrevistada, quien parece no estar muy de acuerdo con la observación.
“El desenfado en las Ultrasónicas era más evidente, pero para mí más que cotorreo la cuestión es añadir siempre un sentido del humor, que es como yo entiendo el arte”.
“Algo desparpajado, fuerte, que te pegue. Pero que también te haga reír y gozar”.
De la actual escena de mujeres en rock latinoamericano, Gua Gua destaca a la rapera guatemalteca Rebeca Lane, con quien interpreta a dueto el tema Libre, atrevida y loca.
“¿No está hoy estancado el espectro de las mujeres en la música con rockeras boleristas como Natalia Lafourcade o Julieta Venegas?”.
Por supuesto que Gua Gua está nuevamente en desacuerdo con la pregunta y como ejemplo de que la cosa va bien menciona a Mare, rapera oaxaqueña que está por sacar su disco y a la que Gardoqui afirma admirar sin cortapisas.
Ali observa que a veces es más fácil ponerte hacer una rimas que hacer una banda y que hoy en días las marcas que han venido a sustituir a las disqueras ya no apuesta por algo real o under.
Pero rescata el poder de grupos de la escena underground como Batallones Femeninos, Las Big féminas o Las Izquierdas (“con baterista mujer que hace tubo y escenario”)
Sobre tocar en Oaxaca asegura que siempre es un placer a, pero también un peligro por la tentación del mezcal.
“Esperamos que si esto es un mezcalicidio, por lo menos sea tranquilo y muy creativo. Tengo muy buenos amigos acá, Oaxaca es un lugar donde se puede tocar de todo y la gente no te va a decir, ay esta cosa no.”
Respecto a futuros proyectos habla sobre lanzar un vynilo de Forever Alone y que sus fechas como DJ ya están cubiertas hasta diciembre.
Además de que el documental que hace mas diez años se realizara sobre el gen de las Ultrasónicas, Todos estamos muriendo aquí, ha sido escogido para una proyección en el Museo de arte Contemporáneo de Filadelfia.
“Ira por primera vez a tocar a Ciudad Juárez, eso me tiene muy emocionada”.
Finalmente Ali se da tiempo para hablar sobre la “horrible y preocupante situación” en la que se encuentra su natal Veracruz .
“Que hoy Javier Duarte y Veracruz pasen como el gobernador y el estado mata periodistas, es indignante”.
“El periodismo es vital y los buenos periodistas son muy preciados. El que hoy quieran aniquilar la libertad de expresión te habla de hasta qué grado han llegado las cosas”.
“Me siento muy avergonzada. Tengo amigos periodistas en Veracruz que de primera mano me dicen que son perseguidos”.
Gua Gua recuerda que antes ella “era medio frígida políticamente hablando”.
Pero que a partir de que estuvo viviendo en Argentina cayó en cuenta que la protesta social se valora y las cosas en realidad suceden.
“Soy gente pensante, he estado en muchas partes del mundo y no puedo decir, esto no me interesa”.
Frigidez no es un concepto que tenga ya que ver con Ali Gua Gua, ni con su ultracumbia, ni con sus manos en una tornamesa, ni con absolutamente nada de lo que hoy hace y la rodea.
