E subsecretario de Ingresos de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), Miguel Messmacher, negó que el cambio en el tipo de impuesto que se aplicará el próximo año a las gasolinas implique un aumento de cuatro pesos del precio al consumidor, como informaron recientemente legisladores de izquierda.
Informó que el impuesto aplicado al refresco ha sido positivo, porque redujo hasta en 6% su consumo y aumentó en esa misma proporción el consumo de agua embotellada, y aclaró que el beneficio de reducción del 50% del impuesto a los refrescos sólo beneficiará a un máximo del 3% del sector, que son los que contienen el menor grado de azúcar; el resto mantendrá el gravamen actual.
Sin embargo, ayer mismo el senador Héctor Larios informó al subsecretario de Ingresos que el grupo parlamentario del PAN acordó mantener sin cambios el impuesto a los refrescos, para que se quede como está actualmente; es decir, no respaldó este cambio hecho por la Cámara de Diputados, a propuesta de los propios panistas.
Ayer, durante el primer día de trabajo de la Comisión de Hacienda del Senado para aprobar el paquete de ingresos 2016, Miguel Messmacher hizo una exposición detallada de los cambios que hizo la Cámara de Diputados a la propuesta original del gobierno federal, pero aclaró que, de ninguna manera, estas modificaciones implican un alza en el precio de las gasolinas.
“Lo de que se ha mencionado de que en realidad en la Cámara de Diputados se aprobó un incremento en los precios adicional a lo que ya vimos hoy, del orden de cuatro pesos, es falso.
“No se está proponiendo en ningún momento un incremento a los precios que estamos observando en la actualidad, ni tampoco se está incluyendo un impuesto adicional al que ya tenemos hoy en día. Lo que se está proponiendo como impuesto fijo es igual a lo que ya hoy en día se tiene de Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) y se tiene esperado para el impuesto de las gasolinas”, dijo.
Messmacher precisó que “el IEPS de gasolinas ya tiene muchísimo tiempo de existir. Lo que en realidad se está proponiendo es que nos movamos de un IEPS variable a un IEPS fijo, donde el IEPS fijo se está estableciendo para que sea exactamente igual al promedio esperado para este año 2015; en ese sentido, lo que han llegado a reportar algunos medios de que se está estableciendo un nuevo impuesto, es falso, el IEPS ya estaba”.
Rechazó las acusaciones de la izquierda de que este cambio se haya procesado de forma poco transparente, pues el punto siempre estuvo en los documentos, desde su presentación del paquete económico, el pasado 8 de septiembre.
Diferendo
José Yunes, presidente de la Comisión de Hacienda en el Senado, descartó que el cambio de un IEPS variable a uno fijo se trate de un nuevo gravamen a los combustibles.
En entrevista con Pascal Beltrán del Río para Excélsior televisión, señaló que, ante la caída del precio del petróleo, una cuota fija en el IEPS permitiría, incluso, que las tarifas de las gasolinas disminuyan.
También en entrevista, el senador Francisco Búrquez advirtió que el próximo año el gobierno federal continuará aplicando el IEPS de cuatro pesos al precio de las gasolinas e, incluso, lo va a oficializar, por lo que descartó que haya una disminución en los precios de los combustibles.
Adelantan rechazo a demandas empresariales
El Consejo Coordinador Empresarial (CCE) y la Confederación de Cámaras Industriales (Concamin) plantearon al Senado 13 cambios fiscales para el próximo año, a fin de incentivar la inversión y generar los empleos y el crecimiento que requiere el país; sin embargo, senadores del PRI, PAN y PRD anticiparon su rechazo a incrementar los beneficios a este sector.
Cada uno de los grupos empresariales hizo ocho propuestas; sin embargo, algunas de ellas se repiten, por lo que en total, se trata de 13 modificaciones que impulsan ante el Senado, desde su Comisión de Hacienda, entre ellas ampliar la deducibilidad del ISR, permitir que hasta 50% de gastos en restaurantes tengan ese beneficio; aumentar los apoyos al sector minero y abrir caminos para evitar la repatriación de capitales, a cambio de regularización de la situación fiscal.
Pedro Higuera, vicepresidente del CCE, precisó el objetivo de sus propuestas de cambio, pues dijo que son necesarias “ante esta situación internacional que se presenta en este entorno internacional de adversidad económica”.
“Nosotros vemos como positivo establecer medidas para fortalecer nuestro mercado interno. Es un punto fundamental, así lo vemos”, manifestó.
A su vez, Juan Casados, de la Concamin, detalló una de sus propuestas, referente a que las prestaciones laborales sean deducibles, pues tal como está ha generado cierre de fuentes de empleo; habló de una encuesta que revela que 70% de sus agremiados paga prestaciones.
“El 63% de estas empresas incrementó su pago de impuestos entre un cinco y 25%, pero más de 50% redujo los salarios. ¿Esto qué viene siendo? Debido a que ya no tienen la deducibilidad de 43%-57%, las cuales son obligatorias por ley, muchas de las empresas están reduciendo esta parte y lo que queremos es considerar que el legislador adecue para que las prestaciones sindicales, y más aquellas que son obligatorias por ley, pudieran ser las mismas acreditadas”, detalló.
Pero frente a estas peticiones, David Penchyna, del PRI, les pidió que entregaran las estimaciones sobre la disminución en la captación fiscal para el país, de aprobarse estos beneficios empresariales.
“Esa inversión que dejan de pagar; ese recurso que dejan de pagar por la vía fiscal ¿lo van a reinvertir en el sector y cómo impactaría al fortalecimiento de lo que queremos todos, que es empleo?”, les preguntó.
Ernesto Cordero, del PAN, respaldó a Penchyna y dijo que es difícil hacer estos cambios.
“La situación nos deja con un dilema lamentable. Por un lado entender que probablemente el sistema fiscal ha generado poca competitividad, que el sistema fiscal ha desincentivado la inversión, que el sistema fiscal ha inhibido la generación de empleos, pero no lo podemos cambiar porque se cayeron los ingresos del petróleo y sería mucho más grave en este momento que se cayeran los ingresos fiscales del gobierno, en una situación donde los ingresos petroleros están en duda, al menos en el mediano plazo”, añadió.
Dolores Padierna, del PRD, les pidió tener mayor solidaridad para con el país y “amar a México” para sacarlo adelante, “porque si unos pocos van a tener todo y para los demás no hay estímulos, el país completo se hunde y a ustedes ni a nadie nos gustaría ver eso”.
Beneficios fiscales
En el proyecto de Ley de Ingresos y Miscelánea Fiscal para 2016, enviado por los diputados al Senado de la República se incluyeron incentivos para las empresas generadoras de empleos.
Destaca el incremen
to del monto de los ingresos que ganen anualmente que podrán gozar de la deducción inmediata de 50 a 100 millones de pesos.