Francisco Hinojosa, autor de la hipnótica, transgresora e infantil, La peor señora del mundo, considera que pesar de que existe un pesimismo por la lectura en México. Los niños de este país cada día están leyendo mas y esto se incrementa año con año.
El autor considera que la manera de medir esta situación tiene que ver con los tirajes que hacen las editoriales, donde resultan fundamentales las ferias de libro que se realizan en las escuelas.
Entonces, ¿existen suficientes autores de literatura infantil en México?, se le pregunta a Hinojosa considera que hoy existen alrededor de ochenta autores mexicanos de libros para niños , cuando hace 23 años solo habitaban en el país tres o cuatro autores .
“Hoy hay un incremento por el interés de parte de las editoriales y los lectores en los libros para niños”.
Hinojosa recuerda durante un encuentro con los medios en la recién concluida Feria Internacional del Libro de Oaxaca, FILO 2015, que a la literatura infantil llego por accidente.
“Algunos editores me pedían adaptaciones de mitos de la época de la Colonia, y entonces la hoy extinta Editorial Novaro decidió hacer una colección con seis cuentos infantiles de autor”.
El escritor y dramaturgo recuerda que hace 33 años inició con A golpe de calcetín, un cuento sobre un voceador que sale adelante de una conspiración tipo thriller policiaco, en base al puro ingenio que le han dado las calles.
“El requisito para aquel cuento era que se ubicara en la primera mitad del siglo veinte y con una extensión 25 cuartillas”.
Recuerda Hinojosa sobre la historia de un niño que lee el periódico, aunque sepa o no lo que está pasando. El cual fue resultado de la gran pasión que el escritor profesa por la novela policiaca.
“Los niños de hoy pueden ver caricaturas de Walt Disney, jugar con los videojuegos y leer cosas que antes pensábamos que no eran aptas para ellos. Antes se consideraba que solo podían leer sobre princesas, animales, castillos, hadas y príncipes”.
Comenta que hoy en día los libros para niños pueden abordar temas que no se consideraban propios para la infancia. Como la diversidad sexual y las desapariciones forzadas.
Recuerda el caso del libro que gano en el premio Barco de Vapor, del cual él fue jurado. ¿A dónde va la gente cuando desaparece? , de Nuria Santiago.
“Es sobre un pueblo completo que empiezan a ver que los hombres ya no están ahí y los niños empiezan a preguntarse ¿qué es lo que pasa?”.
Declara también que en Colombia la escritora Irene Vasco publicó un libro para niños con el tema de una niña que evoca a su padre secuestrado en Paso a paso, “con un tema que ha lastimado mucho a los colombianos”.
¿Esto podría ser entonces síntoma de que la fantasía literaria para los niños esta a la baja y la realidad es lo que se está imponiendo?
“No. los niños hoy tienen toda la gama, desde la fantasía más Harrypotteresca, hasta la realidad más cruda. Y en todo ese abanico que puede haber en medio hay buenos escritores, buenos tratamientos y buenos lectores “.
Hinojosa dice que se está poniendo al día con los dispositivos móviles con una nueva versión de Caperucita roja.
“Cuando niño no leía nada pero jugaba mucho, y eso es lo que sigo haciendo. Me sigue gustando el juego”.
Rememora que de joven le empezaron a decir el príncipe, por una crítica en la sección de sociales de Excélsior sobre su primera adaptación de libro para niños.
“Decía, estos son seis libros escritos por príncipes de la imaginación. Los compañeros de un equipo de fútbol en el que jugaba leyeron eso y dijeron, ¿con que estamos jugando con un príncipe eh? Así me bautizaron, todavía me los encuentro y así me dicen”.
Hinojosa asegura que después de los libros de autoayuda, los libros infantiles son los que más se venden el mundo. A excepción de los países islámicos, donde no se pueden escribir libros para niños, sino están dirigidos por criterios totalmente religiosos.
Apunta que hoy los niños pueden tener una conversación alrededor de un libro.
“Acabo de publicar novela para jóvenes llamada Con los ojos abiertos, que ha tenido un impacto inesperado en ventas. De marzo a octubre se han impreso treinta mil ejemplares”.
El autor informa que próximamente establecerá contactos con diversos jóvenes mediante un programa implementado por la Universidad de Guadalajara llamado Cartas al autor.
Donde alumnos de preparatorias que dependen de la UDG, en la Ciudad de México, Nayarit, Apatzingan y Guadalajara, escribieron misivas dirigidas a Hinojosa, de las cuales se escogerán unas cuantas ganadoras, con cuyos autores el exitoso escritor del mundo infantil podrá convivir, platicar y retroalimentarse.
“La depresión es algo que esta flotando en el ambiente de la juventud de este país. Es un problema que está afectando los jóvenes en todo el mundo. Violencia, desempleo, ausencia de oportunidades, son solo algunas de las posibles razones”.
Finalmente se le pregunta a Francisco Hinojosa si escribiría un libro sobre los niños triquis campeones de basquetbol. Fiel a su prudencia, el escritor recuerda que solo jugó contra ellos y fue apaleado, aunque tuvo la oportunidad de clavar dos canastas.
“Para escribir sobre ellos tendría que tener una verdadera cercanía con ellos”.
