Por: Rodrigo Islas Brito
Comienzan los problemas nuevamente en la sesenta y dos Legislatura, apenas en la segunda sesión ordinaria del nuevo periodo de sesiones en el que es prácticamente el último y tercer año de funciones, la falta de acuerdos entre legisladores de las distintas fracciones llevó a la suspensión de la misma.
La sesión ordinaria había sido anunciada por el departamento de comunicación social del Congreso para iniciarse probablemente entre dos y cuatro de la tarde de este jueves, sin embargo las horas pasaron y el salón de sesiones permaneció tan vacio como lo ha sido el devenir legislativo en estos dos últimos años.
La sesión de este jueves lucia en el papel prometedora con la entrega en días anteriores al Congreso Estatal de la iniciativa de Ley en materia de Transparencia, por parte de los integrantes del Instituto de Acceso a la Información Pública y Protección de Datos Personales del Estado de Oaxaca, o la entrega de la Cuenta de la deuda Pública y el Paquete Fiscal que el Ejecutivo Estatal realizó a través de su Secretaría de Finanzas.
La nueva presidenta de la Junta de Coordinación Política del Congreso (JUCOPO), la panista Natividad Díaz, había anunciado ya en su red social a la una de la tarde una reunión de trabajo entre legisladoras y legisladores de su fracción parlamentaria.
“Analizamos la orden del día propuesta para la Sesión Ordinaria programada para este jueves”:
Había escrito la diputada, pero esa sesión programada jamás llegó. Una persona cercana a la Legislatura que pidió omitir su nombre, comentó.
“Se siguen peleando por lo del dinero. Muchos de las diputadas y los diputados se quejan de que todavía es fecha de que no pueden pagarle su sueldo a sus asesores. Y la verdad es que sin ellos, los legisladores nada más no pueden ni responder un whats up”.
El problema del dinero viene de un señalamiento de malversación de fondos de los presupuestos, que realizaron más de una veintena de legisladores, quienes desde hace ya dos meses acusaron falta de claridad en el manejo de 600 millones de pesos del presupuesto de la Junta de Coordinación Política del Congreso, por parte de sus cuatro presidentes del 2014 y el 2015, el priista Alejandro Avilés y los perredistas Anselmo Ortiz, Félix Serrano Toledo y Jesús López Rodríguez.
Señalando que, este supuesto desfalco que se presume que ronda los 250 millones de pesos ha dejado tan castigado el presupuesto legislativo, que incluso se dice que ya no hay dinero ni para abastecer de papel de baño los sanitarios del edificio legislativo ubicado en San Raymundo Jalpán.
Por lo pronto, en un comunicado se informa que, el nuevo presidente de la mesa directiva del Congreso, el diputado priista Adolfo Toledo Infanzón, ha culpado a Natividad Díaz de la sesión abortada.
Acusando de que, la presidenta de este organismo, Natividad Díaz Jiménez, no se presentó a la reunión previa para definir la agenda y el orden del día.
Toledo Infanzón recordó que, para iniciar la Sesión Ordinaria forzosamente se debe contar con los respectivos acuerdos de los integrantes de la JUCOPO, conformado por su presidenta, Díaz Jiménez, del PAN; Alejandro Avilés Álvarez, del PRI, y Jesús López Rodríguez, del PRD.
“Si la Junta de Coordinación Política no me instruye iniciar con la sesión, pues es muy poco lo que se puede hacer, porque los acuerdos deben surgir de las reuniones previas, sin embargo, la diputada Natividad Díaz no se presentó a esta reunión, eludió y evadió la responsabilidad que tiene para aprobar la agenda y el orden del día”
La declaración de Toledo contrasta con la reunión previa con sus correligionarios panistas, que Díaz mostró en redes sociales, además de sus continuas declaraciones encaminadas a decir que como nueva presidenta de la JUCOPO, era una misión para ella transparentar recursos, que hoy nadie sabe bien a bien donde quedaron.
Lo cual resulta en un negro signo para el futuro del último año de funciones de esta sesenta y dos legislatura local, si se toma en cuenta que desacuerdos parecidos, intestinos entre las dos fracciones legislativas, llevaron a que se suspendieran y cancelaran hasta cuatro sesiones consecutivas durante el pasado periodo legislativo.
Finalmente, en un contra comunicado enviado por el mismo Congreso, la diputada Díaz invitó al Presidente de la Mesa Directiva, a ser institucional y separar la función legislativa de la administrativa.
Dijo que, el diputado Toledo Infanzón debería permitir que su Coordinador Parlamentario, Alejandro Avilés, realice sus funciones, como es la de asistir a las reuniones de trabajo convocadas por la presidencia de JUCOPO.
“Hablemos con la verdad y no nos escudemos en pretextos y falsos requisitos para trabajar”.
En resumen, esta LXII Legislatura luce en su tercer año de sesiones tan conflictuada y proclive a la improductividad como lo ha estado desde su mismo inicio.