Por Comunicado
El nulo apoyo del Gobierno al sector pesquero de Oaxaca, en específico el de la Costa, ha provocado una severa crisis que ha dejado pobreza, marginación y pérdida de vidas humanas; ante esta situación, el senador oaxaqueño Benjamín Robles Montoya sentenció que no permitirá más abusos e inició acciones para reactivar esta actividad primaria.
Por ello, dijo, en un trabajo de unidad con la diputada federal Karina Barón Ortiz, se logró una importante gestión con la Financiera Nacional de Desarrollo Agropecuario, Rural, Forestal y Pesquero (FND), para que en 2016 aterricen apoyos en materia de créditos.
Fue en Puerto Escondido, donde los legisladores y la FND realizaron el primer foro denominado: “Situación actual y futura de la pesca ribereña y de altamar en México”, donde participaron pescadores de varias cooperativas.
Pero en lo que las instancias gubernamentales cumplen con sus responsabilidades y tareas, Robles Montoya y Barón Ortiz apoyaron a los pescadores con equipos de seguridad y rastreo.
“Nosotros sí queremos salir adelante, sé que hay muchos problemas, no quisimos llegar con las manos vacías, conseguimos unos GPS, conseguimos unos chalecos, a lo mejor no les van a resolver su vida pero sí es la demostración de que nosotros no vamos a tratarlos de la misma forma como los han tratado. Nuestro compromiso es que nos veamos muy pronto, porque no puede estar en el olvido este sector, es increíble, yo creo y le decía a Karina, hay que darle el estatus que corresponde al sector”, enfatizó.
Al destacar la urgencia de atención que pide a gritos esta área productiva, Benjamín Robles reiteró que en el Congreso de la Unión será la voz de los pescadores y exigirá a la Comisión Nacional de Acuacultura y Pesca (Conapesca) y al Instituto Nacional de Pesca (Inapesca) mejores condiciones para el pueblo pesquero de la Costa oaxaqueña porque subrayó que la pesca de está ahogando.
Y es que los pescadores vertieron durante el foro que actualmente uno de los problemas que tienen con Conapesca es la regularización de los permisos para poder trabajar. La falta de los mismos, comentaron, ha mermado el ingreso familiar, pero lo más grave, señalaron, se ven obligados a pescar en el marco de la ilegalidad que de ser sorprendidos serían sujetos a cuantiosas multas.
La situación se agudiza aun más porque argumentaron que funcionarios anteriores de esta dependencia desaparecieron del padrón a más de 15 mil pescadores, dejando solo a tres mil 600, pertenecientes al Istmo de Tehuantepec, afectándolos en la distribución del recurso público y apoyos directos.
Los representantes del sector propusieron para terminar con esta problemática la creación de Unidades de Administración Pesqueras y de arrecifes artificiales; avanzar en la integración del Consejo Estatal de Pesca e impulsar un programa de medidas de seguridad.
En respuesta, Benjamín Robles se comprometió a darle seguimiento a estos temas, programar más reuniones y empezar inmediatamente con el trabajo de gestión.