Por 24 Horas
La ejecución de la Presidenta Municipal de Temixco, Gisela Mota Ocampo, es el último de los delitos de alto impacto cometidos por grupos de la delincuencia organizada que disputan el control de Guerrero y Morelos.
Desde los hermanos Beltrán Leyva hasta Guerreros Unidos son varios los funcionarios locales que han sido relacionados, algunos como víctimas y otros como cómplices, con el narcotráfico.
Cuando los Beltrán Leyva se separaron del Cártel del Pacífico, liderado por Joaquín El Chapo Guzmán, tomaron Morelos como base de operaciones y ampliaron su presencia hasta en 11 estados, entre ellos Morelos, Guerrero, Estado de México y el Distrito Federal.
En Acapulco establecieron uno de sus principales centros de operación donde enfrentaron a Los Zetas que pretendían quitarles la plaza.
Entre 2005 y 2009 mandos de las policías estatales y municipales de Morelos y Guerrero fueron asesinados o implicados por sus presuntos nexos con el crimen organizado. En narco mantas firmadas por Arturo Beltrán Leyva, alias El Barbas o El Jefe de Jefes, acusaron a autoridades federales de proteger a El Chapo y sus aliados, según dieron a conocer medios nacionales.
El domingo 6 de diciembre de 2009 la Marina estuvo cerca de aprehender a Beltrán Leyva en una posada en el fraccionamiento Los Limoneros, cerca de Tepoztlán, Morelos, pero el 16 de diciembre murió baleado en un lujoso departamento en Cuernavaca durante un enfrentamiento con elementos de la Marina.
Tras su muerte, del Cártel se desprendieron varios grupos criminales, uno de ellos Guerreros Unidos. Cleotilde Toribio Rentería, alias El Tilde, fundó este grupo criminal en Jiutepec, Morelos, en 2011 y se extendió a Guerrero, lo que provocó varios enfrentamientos con La Familia Michoacana y otros grupos que surgieron de los Beltrán Leyva.
El Tilde trabajó para Édgar Valdés Villarreal, la Barbie, lugarteniente de El Barbas, y fue detenido por Fuerzas Especiales del Ejército en Santa Fe el 9 de julio de 2012; fue relevado por Mario Casarrubias Salgado, alias El Sapo Guapo, quien fue escolta de los Beltrán Leyva y extendió sus operaciones al Estado de México. Fue acusado por la Comisión Nacional de Seguridad de ser el principal exportador de droga a Chicago en tráileres y autobuses. Fue detenido el 29 de abril de 2014 por fuerzas federales, en Toluca.
Su hermano Sidronio, alias El Chino, lo relevó tres meses después en el liderazgo de Guerreros Unidos y a él se le atribuye la orden de secuestrar a los 43 normalistas de Ayotnizapa. Una de las nuevas líneas de investigación apunta a que el móvil fue que los estudiantes tomaron un autobús con droga. A Sidronio lo detuvieron en un retén sobre la carretera México-Toluca, en Edomex, el 16 de octubre de 2014.
Según información oficial Guerreros Unidos tiene presencia en Coyuca de Catalán, Altamirano, Acapulco, Iguala, Arcelia, Chilpancingo y Taxco en Guerrero; en Jojutla, Jiutepec, Cuernavaca, Xochitepec, Totolapan y Temixco, en Morelos.
Varios integrantes de este grupo han sido aprehendidos en Morelos, Adán Zenén Casarrubias Salgado, alias El Tomate, hermano de Mario y Sidronio, fue uno de los últimos. La Policía Federal y el Ejército lo sorprendieron el 30 de octubre de 2015 con Érick Ulises Ramírez Crespo, alcalde de Cocula, en un restaurante sobre la carretera Cuernavaca- Temixco.
El 2 de enero de 2016, horas después de tomar posesión, la Presidenta Municipal de Temixco, Gisela Mota Ocampo, fue asesinada a balazos por un grupo armado en su casa.