Por Rodrigo Islas Brito
El Consejo de Pueblos Unidos en Defensa del Río Verde (COPUDEVER) vía comunicado exigió justicia frente al asesinato del periodista Marcos Hernández Bautista, corresponsal del diario Noticias en la Costa y colaborador de radiodifusoras en Pinotepa Nacional y Santiago Jamiltepec, el cual según el comunicado enviado por la COPUDEVER,se une a una larga lista de hechos violentos en la región de la Costa, de los cuales la gran mayoría han quedado impunes.
“Existen intereses de grupos de poder económico y político en la región por seguir controlando la vida de las comunidades”.
Señala la organización, asegurando que Marcos Hernández fue un periodista muy cercano a la gente.
“Fue alguien que siempre apoyó nuestra lucha por la defensa del territorio, siempre nos dio voz en los medios, siempre estuvo en el lugar, siempre nos acompañó en nuestras movilizaciones, eventos, fiestas, en nuestra vida”.
“Lamentamos que en nuestra región la voz de Marcos se haya acallado, pues era de los pocos que se atrevía a denunciar, él creía en la organización de los pueblos y en sus derechos”.
En el escrito (fechado en San Antonio Río Verde, el 23 de enero de 2016), la COPUDEVER se une al dolor de la familia del periodista asesinado, exigiendo que su asesinato no quede impune y un certero castigo a los responsables.
“¡Exigimos que el Estado Mexicano brinde garantía para la labor de periodistas, defensoras y defensores de Derechos Humanos!”
En este mismo tenor se pronunció hace dos días la Defensoría de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca (DDHPO) considerando como muy grave la ejecución de dos comunicadores oaxaqueños en menos de 24 horas-
En el escrito firmado por el titular de la Defensoría, Arturo Peimbert Calvo, Defensor de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca, se recuerda que los medios de comunicación amanecieron el viernes con la información del asesinato de Hernández Bautista, para unas horas después al siguiente día dieron cuenta del homicidio de Reynel Martínez Cerqueda, conductor de la radiodifusora El Manantial, de Santiago Laollaga, en el istmo de Tehuantepec.
“Además de la tragedia humana que implica la violencia homicida, los ataques perpetrados contra periodistas son agravios directos hacia las aspiraciones democráticas de cualquier sociedad, pues acotan la circulación de información y de las ideas, lo que limita la capacidad ciudadana para participar en el ámbito público y decidir, de manera consciente e informada, el rumbo de su sociedad”.
Dicta el comunicado de prensa de la DDHPO, donde se expresa una gran preocupación ante el aumento de la violencia contra periodistas en el estado.
En razón de estas dos ejecuciones consuetudinarias de trabajadores de la información, la Defensoría de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca demandó a la Fiscalía General del Estado realizar una investigación pronta y exhaustiva que permita identificar a los responsables y sancionarles conforme corresponda a derecho, para evitar que la impunidad abone a la comisión de nuevos agravios.
Este organismo hizo también un llamado al gobierno del estado para asumir con la debida seriedad las medidas cautelares que están en curso, dirigidas a proteger la integridad de periodistas cuyo nivel de riesgo ha sido evidente.
En el comunicado la Defensoría expresa sus condolencias a las familias de los comunicadores y a las comunidades a las que servían, y reitera que a través de la Defensoría Especializada en Protección a Periodistas, Defensoras y Defensores de Derechos Humanos, a cargo de Razhy González, la DDHPO como organismo autónomo permanecerá vigilante de que los agravios contra los periodistas no queden en la impunidad.