Por Excélsior
El uso de drogas como mariguana, opio, morfina y heroína en Oaxaca es legal desde 1922, cuando el Congreso de la entidad aprobó la Ley contra los Vicios del Alcoholismo y de las Drogas Heroicas, con la cual se permite el uso y venta de diversas sustancias para tratamientos médicos.
El artículo 28 del Capítulo III correspondiente a la venta de drogas, dice que la venta de opio, morfina, heroína, cloroformo, éter, y cualquier otra sustancia que produzca perturbaciones en el sistema nervioso, “solamente podrá hacerse en droguerías, farmacias y boticas y mediante prescripción de un médico titulado”.
Al respecto, el presidente de la Comisión de Asuntos Constitucionales de la LXII Legislatura del Congreso de Oaxaca, el diputado Jaime Bolaños Cacho Guzmán refirió que esta ley aún está vigente, con su última reforma de 1946, “pues a la fecha no se ha emitido en Oaxaca ninguna otra que la derogue”.
Agregó: “Cualquier ciudadano o ciudadana podría hacerla efectiva, siempre y cuando, compruebe que necesita de alguna de esas sustancias”.
No obstante, apuntó, la Ley contra los Vicios del Alcoholismo y de las Drogas Heroicas se contrapone a la federal Ley General de Salud: “Automáticamente la segunda deroga a la primera”, insistió.
Según el legislador, “la aplicación de la norma sería anticonstitucional, a partir del mandato federal dispuesto en la Ley General de Salud”.
“Los ciudadanos oaxaqueños que eventualmente quisieran hacer efectivo el decreto estatal tendrían que apelar al recursos constitucional del amparo”, consideró.
La Ley contra los Vicios del Alcoholismo y de las Drogas Heroicas fue aprobada durante el gobierno del general Manuel García Vigil (1920-23).
Asimismo, requiere a los propietarios de las droguerías, farmacias y boticas a inscribir el nombre del usuario a quien esté destinada una receta que contenga cualquiera de las drogas.
Por otra parte, la norma estatal no prevé el cultivo de la cannabis, que en aquel entonces se le denominaba con el nombre de Rosa María.
“Artículo 31.- Queda absolutamente prohibido el cultivo de la planta Rosa María, conocida con el nombre vulgar de mariguana.”
Reacciones
Como “un absurdo jurídico” calificó la abogada y especialista Ximena Chavarría la ley sobre drogas en Oaxaca.
Chavarría explicó que la publicación de dicha legislación fue en el año de 1922, su última reforma es de 1946 y, “si consideramos que la última actualización en la página del Congreso de Oaxaca es de 2012 y no hay anotaciones sobre su derogación, ésta sigue vigente”.
Consultada por Excélsior, la abogada expuso que la Ley contiene una serie de “perlas” por las cuales esa legislación estaría entre los grandes absurdos jurídicos del país, tales como que su artículo 31 prohíbe “el cultivo de la planta Rosa María, conocida con el nombre vulgar de mariguana” o que según el artículo octavo “queda absolutamente prohibida la venta de bebidas embriagantes, en territorio del estado, el día domingo”.
El abogado Jesús Salgado explicó que si la ley oaxaqueña llega a tribunales mediante una demanda de amparo, y, tras su análisis, resulta contraria a los preceptos constitucionales, deben predominar las disposiciones de la Carta Magna y no las de legislaciones ordinarias.
Son sustancias que pueden ser de origen natural o de productos químicos, que pueden generar depresión o estimulación del sistema nervioso central, modificando la percepción de las emociones, el tiempo y el espacio, así como los sonidos, formas y colores.
CEREMONIAS Y MEDICINA, ENTRE LOS USOS EN ESTADOS
AGUASCALIENTES.- Hongos alucinógenos, Salvia divinorum, bado o peyote son drogas que se utilizan de manera cotidiana en Oaxaca, Aguascalientes, Nayarit, San Luis Potosí y Chihuahua.
El Consejo Estatal de Médicos Tradicionales Indígenas de Oaxaca (Cemito) defendió su derecho de usar hongos alucinógenos y plantas medicinales en tés e infusiones, para tratamientos naturales de enfermedades.
El vicepresidente del Cemito, Santiago Cortés Martínez, resaltó el prestigio de los curanderos oaxaqueños, dentro y fuera del país, por sus terapias de sanación mediante el uso de herbolaria y alucinógenos, rechazando que represente un delito.
Apuntó que la “deshumanización” del sistema de salud oficial orilló a los pacientes a buscar alternativas en su tratamiento, a precios accesibles.
La Ley Estatal de Salud valida el uso de unas 400 hierbas medicinales en la práctica de la medicina tradicional, como la ruda, el epazote, la albahaca y la bugambilia, entre otras.
Reconoció que en la práctica de la medicina tradicional, los pueblos originarios usan la mariguana, macerada en aguardiente, para masajes corporales.
Con relación al uso de los hongos silvestres en las comunidades de la zona indígena mazateca, explicó que se usan en terapias de sanación.
La Salvia divinorum es conocida popularmente como ska pastora en las ceremonias de sanación por los chamanes (curanderos o iluminados) de la Sierra Mazateca, al norte de Oaxaca, en la región de La Cañada.
En ocasiones, los curanderos la consumen en rituales religiosos alternando con los hongos sagrados (identificados como “los pequeños que brotan”) por sus propiedades terapéuticas.
Otra de las plantas que dominan los rituales oaxaqueños son el llamado bado (Turbina corymbosa) y bado negro (Ipomea violacea).
Para los chinatecos, mixtecas, mazatecas, zapotecos y otros grupos indígenas de Oaxaca son uno de los principales alucinógenos sagrados.
El ritual moderno realizado con semillas de ololiuqui incorpora muchos elementos cristianos. De hecho los nombres de semillas de la virgen o semillas del manto de María, muestran un sincretismo de lo cristiano con lo pagano e indican claramente que ambas especies se consideran como regalos divinos.
El peyote es la planta utilizada por los huicholes y los rarámuri en sus ceremonias en diferentes puntos de los estados de Nayarit, Aguascalientes, San Luis Potosí y Chihuahua, principalmente.
Los rarámuri, la utilizan en un ceremonial, donde el sincretismo con el mundo huichol está presente. Es tomado en forma de té durante sus ceremoniales, mientras que para los huicholes significa todo un rito desde su preparación para buscarlo, encontrarlo y consumirlo.