Por Rodrigo Islas Brito
Si sólo quieres pasarla bien El libro de la selva (EUA, 2016) es una opción a tomarse en cuenta. La vuelta al ruedo que hace Disney de uno de sus títulos animados más preciados (1967) tiene el suficiente respeto por su público como para no infantilizar demasiado el trámite.
El director Jon Favreau, responsable en buena parte del renacer del universo Marvel, se aboca a presentar una correcta y animosa síntesis de animación digital y guion bien estructurado, donde el relato clásico de Rudyard Kipling se significa como metáfora del viaje que han de hacer los oprimidos para confrontar a su opresor, en una selva virtual construida y dibujada en Burbank.
Los animales parlantes acá ya parecen reales y complejos y el niño selva profeta de la flor dorada, Mowgli (Neel Sethi) tiene el suficiente encanto como para no quedar como un palurdo hablando con figurillas digitales. Favreau, quien por imaginación nunca ha parado en sus blockbusters (Iron Man, Vaqueros vs Aliens) le suma a su capacidad visual, un peso narrativo que logra cohesionar los fuelles de tigres tuertos y justicieros, lobos combativos y protectores, elefantes orgullosos con visión arquitectónica, changos marangos guiados por un viejo mono del tamaño de King Kong y un oso güevonazo que se la pasa viviendo en las antípodas que la bestia alevosa que casi destripó a DiCaprio.
Para esto ayudan las voces que Favreau escogió para esta puesta al día, Idris Elba, amenazador y despiadado como Shere Khan, el felino que solo quiere mantener el equilibrio selvático aunque para eso tenga que matarlo todo, Bill Murray , perfecto en su tono relajado como el Balú bobalicón que no abusa del trabajo y sigue buscando “solo lo más vital, nomas” (aunque claro que nunca llegara a ser tan bueno como el siempre fenomenal Tin-Tan), Scarlett Johansson , perfecta en su casi cameo de boa kilométrica e hipnotista , que a la petición de un “ confía en mi” es capaz de dejarte sin uno solo de tus huesos.
Y por supuesto el ya venerable Christopher Walken, idóneo como el fantochón y temerario Rey Louie, ejecutando un muy sabroson cover de ese clásico sobre poder, fuego y ganas de cambiar titulado “Quiero ser como tú”.
Compadezco a las madres y padres de familia que tendrán que por ir con sus pequeños al cine tendrán que soplarse la versión doblada al español, aunque sus enanos seguro se van a divertir.