Rodrigo Islas Brito.
Según el titular de la Secretaria de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, los elementos policiacos federales que participaron en cada uno de los operativos que tuvieron lugar el pasado y aciago domingo en Nochixtlan, Oaxaca no portaban armas de fuego.
Esta afirmación del máximo responsable de la política interna del país se da pese a las fotografías del fotoperiodista oaxaqueño Jorge Arturo Pérez Alfonso, que en diversos medios informativos nacionales, el más reciente de ellos el portal Sin Embargo, han mostrado a policías federales portando y apuntando con armas largas y pistolas automáticas.
También se da pese a que el comisionado de la Policía Federal, Enrique Galindo, confirmó en pasada conferencia de prensa que los elementos policiacos federales si usaron armas.
“Efectivamente, al final, muy al final, llegó en apoyo un grupo de la PF que portaba sus armas de cargo. Ya había pasado todo, ya habíamos ordenado el repliegue de todas las policías”.
Dijo Galindo en conferencia de prensa donde aseguró que los policías venían en un primer momento desarmados, pero que fueron por sus armas una vez que se dieron cuenta que algunos de sus contrincantes si venían armados y estaban disparando contra población civil.
No obstante, pese a estos antecedentes Miguel Ángel Osorio Chong, según estimaciones el presidenciable más fuerte del actual gabinete para el 2018, volvió a insistir sin lugar a cuestionamientos previos o posteriores, que durante la pasada conflagración entre fuerzas policiacas-maestros y sociedad civil que se dio el domingo que ha dejado hasta ahorita la cifra ya de ocho muertos, los policías no iban armados y no mataron a nadie.
Según el secretario los operativos en Oaxaca se realizaron bajo los protocolos de uso de fuerza a la contención de manifestaciones y bloqueos. Afirmando además que la Procuraduría General de la Republica en colaboración con la Fiscalía de Oaxaca investigaran y darán con quien disparo primero, castigando a los responsables.
Esta negación de la secretaría de gobernación se da en medio de un creciente clamor internacional sobre la masacre de Oaxaca, que ha llevado a que el gobierno de Estados Unidos analice ya emitir una alerta de viaje a Oaxaca, con la fiesta de la Guelaguetza, la más fuerte apuesta turística del estado, a unas semanas de realizarse (por lo menos en el papel).
Además de que el Programa Internacional de Derechos Humanos de la Universidad de Toronto pidió a Canadá que retiré a México de su lista de “países seguros” por la gravedad de los abusos a los derechos humanos que se cometen en este país.
Donde en palabras de un escritor afincado en Oaxaca, “según la versión oficial, los muertos se matan entre ellos”.
Vale recordar finalmente la entrevista que hoy sostuvo el gobernador de Oaxaca, Gabino Cué Monteagudo con la periodista Denisse Maerker, que si él afirmó la misma noche del domingo que la policía no iba armada es porque así se lo habían informado, que habría que ver si no le estaban mintiendo.
“Yo doy a conocer lo que me informan”, “esa es la información que yo tengo”, explicó el mandatario.
