Consideraciones de un microempresario al borde de la quiebra por situación social

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Rodrigo Islas Brito/RIOaxaca.

Oaxaca de Juárez. Enrique Antonio Lira López cuenta que fundó su granja de conejos desde que estudiaba veterinaria en la universidad, hace 27 años, para ayudarse en sus estudios. Hoy el microempresario oaxaqueño se declara al borde la quiebra.

Cuenta que su búsqueda por la comercialización de la carne de conejo, va creciendo en la azotea de su casa, hasta que en el 2006 cambió a los conejos  a una granja, con jaulas de madera , piso de tierra y láminas de cartón.

Con un apoyo de SAGARPA hizo una galera a 400 metros cuadrados de construcción con mallas ciclónicas y jaulas tecnificadas y fue aumentando en su población de conejos en tanto la producción así lo iba marcando.

“Íbamos bien. Hasta ahora que, después de diez años del 2006, viene el problema social que se está viviendo en estos momentos en Oaxaca, por los bloqueos, por la toma del Centro Histórico, la gente no vino a Oaxaca en esta Guelaguetza”.

Perteneciente a una asociación de agroindustriales, con un stand en la aun presente feria del mezcal, Lira López estima que a lo mucho cincuenta extranjeros llegaron al stand en esta jornada turística.

“El poco turismo que llegó fue nacional y local, nuestros clientes fuertes, restaurantes  como Casa Oaxaca, el Vasco y el Bistró a estas fechas nos han consumido cuarenta o cincuenta conejos, cuando el año pasado habían comprado hasta 400 conejos”.

“Porque ellos al no vender, y que no los visite el turismo extranjero que puede pagar 150 pesos por un platillo, lógicamente dejaron de comprarnos. Y no somos solo nosotros, es la gente de las tortillas, del chapulín”.

El entrevistado, estima que la problemática social actual ha repercutido en la viabilidad económica de las microempresas y de las empresas familiares.

“Con el presidente de la asociación de agroindustriales, platicaba el cómo le vamos a hacer. Se supone que Oaxaca se declarar zona de desastre económico, pues las ventas están muy mermadas desde hace más de dos meses que empezó esta situación”.

“Hemos despedido gente, nos hemos retrasado en los pagos, los créditos que tenemos en el banco no los sigue cobrando, te sigues endrogando más y encima de todo, no sacas ni para los gastos mínimos que tienes”.

Lira considera que hoy la situación de su granja es crítica, sin solvencia para el ingreso, con animales que comen diario, y a los que hay que mantener. Cuenta que a los conejos les cambiaron el alimento de purina (alfalfa pelitizada que le permite al conejo desarrollar musculo y no morirse) a alfalfa simple.

“Nos estábamos gastando una tonelada de alimento semanal, pero ya no pudimos. El cambiarles el alimentos ha traído una mortalidad de 15 o 20 conejos diarios, hubo un día que murieron hasta setenta conejos”.

“Lo que hice fue pedir dinero prestado, otra vez, para poder comprar alimento y dárselo a la pura engorda, porque estos son los animales que hay que cuidar. Si los dejábamos así no íbamos a tener ni dinero para venta, ni animales que vender”.

“A las hembras no se les está dando alimento, porque no tenemos dinero. Eran 30 montas semanales (cruzas), hoy no nada más se están dando dos, porque las hembras no quieren ser montadas, porque su niveles de nutrición están al mínimo, la hembra prefiere mantenerse ella que gestar”.

Lira considera que esto “está peor que el 2006”, pues incluso entonces afirma que “no había tanta incertidumbre”.

“Porque ahora no solo cerraron la ciudad de Oaxaca, sino también el Istmo, todas las entradas y salidas con bloqueos constantes. No llegó el turismo, nosotros vivimos de eso.

El microempresario dice que no vino el turismo europeo que es el que más consume, que el turismo local no consume, aunque eso sí, observa que si a tu producto le pones que es de Puebla o Guadalajara,  puede que lo vendas bien.

Lira comenta que ventas no ha habido, pero confía en que su presencia en la Feria del mezcal le permita posicionarse con el público consumidor el resto del año.

“Esperamos que esto repunte, ¿pero mientras que vamos a hacer nosotros? Estamos pensando en disminuir a lo mínimo la producción en la granja, pero esto va a repercutir en que en seis meses más nos quedemos sin animales. No tendremos animales para vender en diciembre, que es un muy buen mes”.

Del anuncio de un  grupo de empresarios que ya anunciaron que a partir de este ocho de agosto se van a ir a huelga para protestar por más de dos meses de bloqueos magisteriales y zozobra social.

“Está muy bien, pero ¿y luego? ¿Cuantos días va a durar? Uno, dos días, es lo mismo que si bloquearan los maestros, lo que tenemos que hacer es tomar medidas más drásticas como sociedad civil”.

“Han estado soltando a sus líderes, ¿qué más quieren?, el año que entra van a querer otra cosa y cada vez será más y más”

¿A que te refieres con drásticas? , se le pregunta a un Lira ya enrachado en su diatriba antimagisterial. El también veterinario  lo cavila un poco.

“Pues sí, no puede decir si eres maestro no te vendo, porque la verdad es que los profesores mueven la economía de Oaxaca, así que hasta por ahí estamos agarrados de los tanates”.

Acusa que el gobierno estatal que está por concluir no repartió la riqueza y si la concentró en dos o tres manos, que no hay políticas públicas para la cunicultura y que a esta no se le ha tomado en cuenta para campañas contra la desnutrición, a pesar de que afirma es una carne barata y nutritiva, “la mejor carne de animal doméstico para combatir la desnutrición”.

¿Qué proyectas como comerciante que pase si la actual situación social continua?, Lira se va derecho.

“Solo queremos que nos den oportunidad de abrir espacios para poder vender nuestros productos. Y si esta incertidumbre sigue nos va a cargar la chingada, así te lo digo”.

“Oaxaca se va a ir a la quiebra, sino es que lo está ya. Si te fijas cada vez hay más casas en venta y en renta en la ciudad. Lo que va a suceder es que van a empezar a haber es una ola de migración y Oaxaca se va a quedar para unos pocos”.

De las estrategias lo que Lira rescata es hacer más muestras gastronómicas, como las que se llegaron en Ciudad Judicial  y a Ciudad administrativa.

Ya también pedimos prestado para comprar un carrito de hot dogs, si no puedes con el ambulantaje, únetele, aunque no tenemos permiso. No dan permiso al ambulantaje, pero el centro está lleno de el. Es el unos si y otros no”.

Lira dice que si él y su empresa logra estar el año que entra en la Feria del mezcal, ya la libraron, sobre todo tomando en cuenta que sus números rojos hoy ya están morados.

“Vamos a tener que ir a los bloqueos a venderles a los maestros y a los que están con ellos, es lo único que queda, el irles a ofrecer tu producto a aquellos que estas criticando para que te puedan sacar de donde estas”.