Mujeres indígenas encabezan defensa del territorio en Oaxaca: especialistas

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Oaxaca de Juárez. Las mujeres indígenas que defienden sus territorios en Oaxaca no sólo protegen un espacio geográfico, sino la supervivencia de su sociedad, porque para los pueblos originarios la tierra y el territorio son los espacios en que la comunalidad se construye, expuso la defensora de derechos indígenas Gabriela Linares durante la inauguración de la Feria Internacional del Libro Feminista (Filmufe) el jueves 11 de mayo último.

En la conferencia inaugural de la Filmufe, con el título “Mujeres en el poder, comunidad y comunalidad”, Gabriela Linares explicó que actualmente las mujeres encabezan en Oaxaca los procesos de defensa del territorio en diferentes puntos del estado, ante la llegada de megaproyectos extractivos que se intentan instalar para beneficiarse con los recursos naturales de los pueblos originarios, pero sin considerar a éstos, aun cuando ellos son los dueños del espacio.

La Defensoría de los derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca coopera en las actividades de esta II Feria Internacional del Libro FeminisTA, como parte del convenio de colaboración que tiene con la asociación civil Lunas del Sur. La presente Filmufe es la actividad que cierra los trabajos del III Diplomado de Estudios de las Mujeres, Géneros, Feminismos y Descolonización.

En esta actividad intervienen especialistas que se han formado en el Diplomado de Estudio de las Mujeres, Feminismos y Descolonización, actividad en cuya organización también participa la Defensoría de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca, en colaboración con instancias académicas y de la sociedad civil.

En el foro realizado el jueves 11 de mayo en el Museo de Arte Contemporáneo de Oaxaca (MACO), la defensora puntualizó que este proceso de defensa es sumamente importante para las comunidades y pueblos originarios pues, sólo en la Sierra Norte de Oaxaca, 42 mil hectáreas han sido entregadas en concesión para explotar minas de oro y plata.

Acompañada por las defensoras de los derechos de las mujeres Lidia Aguilar y Felícitas Cruz, así como por la coordinadora de la organización Lunas del Sur, Erika Lilí Díaz Cruz, Gabriela Linares resaltó que la defensa del territorio es la defensa de la vida, y por ello las mujeres como reproductoras de vida son quienes más se comprometen en estos procesos.

Linares agregó que, para las mujeres indígenas, la vida y el territorio se identifican con su identidad como personas, su cultura como pueblo originario, así como con su herencia, ya que ellas los transmiten de generación en generación, con su sentido de pertenencia a la comunidad, pero desde la perspectiva de la comunalidad.

Por su parte, en la conferencia que ofreció para la Filmufe en el MACO, la feminista Felícitas Cruz explicó que la comunalidad, para los pueblos originarios, es la forma de vida cotidiana, reconocer que pertenecen a la tierra y deben respetar cuanto está a su alrededor, ya sea el agua, el cielo, el fuego, el aire. Para los pueblos, comunalidad es trabajar en reciprocidad, compartir y acompañarse en las conmemoraciones alegres o tristes, subrayó.

Cruz, originaria de San Juan Mixtepec, enfatizó que las comunidades y pueblos originarios necesitan revalorar su conocimiento ancestral para recuperarlo, reconocer que sus saberes son valiosos, aunque carezcan del aval de la estructura social convencional, pues por esos saberes ellas y ellos, como indígenas, han sobrevivido. Citó como ejemplo el valor que los pueblos originarios le han dado a la tierra como espacio sagrado en los procesos de cultivo, lo cual les ha permitido subsistir sin la destrucción de su entorno.

A su vez, la indígena mixteca Lidia Aguilar intervino explicando que, para las mujeres indígenas, es diferente ser feminista en una comunidad, porque el contexto es diferente; por eso, explicó, al encontrarse con el feminismo, ella construyó y deconstruyó paradigmas que le permitieran tener una perspectiva acorde con su realidad, lo cual la ha llevado a que hoy se asuma como una “feminista comunitaria”.

Añadió que, para ella, el feminismo comunitario es el reconocimiento de la igualdad de hombres y mujeres como miembros de su comunidad, quienes fueron divididos pero se han enfrentado a similares despojos e injusticias, pues, como integrantes de pueblos, a ellas y a ellos les han vedado el aprecio por su cultura e identidad.

La defensora de derechos de las mujeres indígenas agregó que el sistema social capitalista les ha intentado arrancar su identidad como pueblos, despojándolos de su lengua y enseñándoles que deben ir tras el dinero para obtener reconocimiento o reclamar el respeto a su dignidad, despreciando así sus saberes ancestrales y favoreciendo el rompimiento de su comunalidad.

La feminista comunitaria destacó que para ella el proceso iniciado en el Diplomado de Estudio de las Mujeres, Feminismos y Descolonización le permitió cambiar primero la visión de sí misma, reconocerse como una persona con dignidad, así como reconciliarse con su identidad indígena y su comunidad.

“Ahora –concluyó Lidia Aguilar– me he apropiado del feminismo que al principio me era ajeno, hasta convertirlo en algo propio: el feminismo comunitario con el que busco impulsar cambios positivos en mi pueblo”.