Proceso.
Ciudad de México. Luego de que la inflación llegó en junio pasado al nivel máximo registrado en más de ocho años (6.3%) el Gobernador del Banco de México, Agustín Carstens, afirmó que ese índice está cerca de su punto máximo y empezar su descenso.
Tras concluir una reunión en esta ciudad con el presidente de la Reserva Federal de Dallas, Robert Kaplan, dijo:
En su más reciente decisión de política monetaria, el banco central elevó la tasa de interés en 25 puntos base para ubicarla en 7% considerando el incremento en junio de la tasa de interés de la Reserva Federal y con el objetivo de reducir la inflación hacia el objetivo de
Según el Inegi, la inflación llegó a 6.3% en junio pasado, el máximo registrado en ocho años y medio y lejano al objetivo de 3% del banco central.
“Un aspecto muy importante que hemos reiterado es que la política monetaria tiene un efecto rezagado sobre la inflación, anticipamos que la convergencia hacia el 3% se acelere al inicio del año entrante. El banco seguirá vigilante de la inflación y actuará oportunamente”, vaticinó Carstens.
Respecto a los movimientos de la política monetaria de la Reserva Federal, dijo que el Banco de México no tendrá una respuesta “mecanicista” para alinear las tasas de interés, sino que estará sustentada en un análisis “cuidadoso” de la Junta de Gobierno.
Carstens también del proceso electoral en puerta y afirmó que el organismo dará certidumbre al país durante 2018.
“Lo que el Banco va a hacer es dar certidumbre en el 2018, como lo hacemos en cualquier otro año. El mandato del Banco trasciende los periodos presidenciales”, acotó.