Oaxaca de Juárez. Con el objetivo de garantizar que oaxaqueños, así como turistas nacionales y extranjeros consuman alimentos en buen estado, los departamentos de Control Sanitario y de Asistencia y Promoción de la Salud, pertenecientes a la Dirección de Salud Municipal, realizaron un operativo de verificación a los puestos de comida que se instalaron en las escaleras que conducen al cerro del Fortín.
“Es para garantizar a la gente que va a consumir alimentos frescos y de buena calidad”, mencionó Mercedes Pérez Huerta, Jefa del Departamento de Control Sanitario Municipal, al mencionar que para estas tareas se movilizaron a un total de siete verificadores.
De esta manera, se inspeccionaron más de 80 puestos de comida, que se instalaron en esta zona, con motivo de las fiestas de la Guelaguetza y que ofrecen diversos platillos típicos de Oaxaca como: barbacoa, memelas, empanadas, frutas frescas, tejate, aguas frescas, entre otros alimentos.
Las y los verificadores constataron que quienes manejan, elaboran y expenden los alimentos cuenten con su constancia de manejo higiénico de alimentos expedida por el municipio de Oaxaca de Juárez, así como que utilicen la indumentaria adecuada como cubrepelo, cubreboca y mandil, además que tengan uñas cortas y no usen alhajas.
Asimismo, las y los inspectores sanitarios llevaron a cabo una revisión de los alimentos, que consiste en constatar que tengan buen color, olor, sabor, textura y consistencia.
En este sentido, Elvia Martínez una visitante del estado de Veracruz, mencionó que al ver que el gobierno municipal de Oaxaca de Juárez realiza este tipo de acciones, le brinda la seguridad y confianza para seguir conociendo y deleitarse el paladar con la gran variedad de productos de la gastronomía oaxaqueña que ahí se expende.
Pérez Huerta dio a conocer que gracias a los constantes exhortos que realizan la gran mayoría de los comerciantes cumplen con las normas sanitarias, por lo que sólo se han detectado irregularidades menores, mismas que son meritorias de un exhorto; sin embargo, reconoció que de ser recurrente la incidencia de una irregularidad se puede proceder a una multa que puede ir de los 300 hasta los 1, 500 pesos.
La funcionaria municipal informó que, gracias a la disposición de los comerciantes de alimentos a las acciones preventivas a través de pláticas sobre la higiene en la preparación y expendio de los alimentos y su importancia para evitar enfermedades de tipo gastrointestinal, no se dio el aseguramiento o decomiso de algún producto en mal estado.