Oaxaca de Juárez. Este lunes regresó a la normalidad educativa el Centro Escolar de Juchitán, en el que cerca de mil alumnos -de ambos turnos-, recibirán clases en 36 aulas provisionales que se construyeron para ello; como esta escuela, el 97% de las instituciones educativas de educación básica en Oaxaca ya tienen actividades pedagógicas.
Luego de que el sismo de 8.2 grados en la escala de Richter del pasado 7 de septiembre afectara severamente las instalaciones del plantel, las aulas originales tuvieron que ser demolidas en su totalidad porque las graves afectaciones en paredes y techos.
Esta institución, la cual fue fundada el 11 de septiembre de 1938, representa un espacio emblemático en la vida de los juchitecos. Generaciones de hombres y mujeres se formaron en esta escuela.
Las aulas que se construyeron de manera provisional – y que hoy son ocupadas – cuentan con el Dictamen de Factibilidad para su uso temporal; lo anterior, en tanto se realiza la edificación del espacio original, el cual tiene un 35% de avance por parte de elementos del Ejército Mexicano.
Este lunes, la comunidad del Centro Escolar Juchitán se suma al 97% de escuelas de la entidad que cuentan con clases, lo que representa 13 mil 355 instituciones, 927 mil 15 alumnos y alumnas, así como 51 mil 861 docentes.
Con responsabilidad y en coordinación con las autoridades municipales, hasta la fecha, 8 de cada 10 escuelas del Istmo se encuentran en clases, así como el 97% de todos los centros educativos de la entidad
Las y los estudiantes continuarán con el rescate de los contenidos pedagógicos con un calendario especial, aunque muchos alumnos y alumnas recibieron los aprendizajes-clave en los albergues conectados con la señal de “Educando TV”, que se transmitió con el apoyo de las Secretarías de Educación Pública, de Comunicaciones y Transportes y el Instituto Estatal de Educación Pública de Oaxaca.
El espacio provisional del Centro Escolar Juchitán cuenta con señalamientos y zonas de seguridad para que las y los alumnos se resguarden en caso de registrarse un sismo; además, se han realizado simulacros con la comunidad estudiantil para que conozca el actuar en caso de una contingencia.
