El Financiero.
Ciudad de México. La Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) ha ordenado una investigación al Banco del Ahorro Nacional y Servicios Financieros (Bansefi) por las tarjetas con las que se distribuye ayuda a los damnificados de los terremotos en Chiapas y Oaxaca.
Como es sabido, Bansefi recibió el encargo de dispersar el dinero del Fondo de Desastres Naturales (Fonden) a las decenas de miles de personas que sufrieron daños parciales, y totales, en su patrimonio por los sismos del 7 y del 19 de septiembre, pues también los damnificados en Morelos, Puebla, Estado de México y, eventualmente, la Ciudad de México recibirán esas tarjetas.
Esas tarjetas ya fueron noticia a principios de mes porque al menos 57 resultaron clonadas, con un daño al banco, que ha tenido que reponer esos fondos, por medio millón de pesos. Digo al menos porque en las últimas horas hay versiones que sostienen que ya son muchas más las personas que fueron víctimas de clonación, y que el monto de los daños económicos subsecuentes ha crecido sustancialmente.
En este espacio, el 16 de noviembre se publicó que resultaba extraño que Bansefi haya decidido que las tarjetas repartidas en Oaxaca y Chiapas fueran de banda magnética y no de chip, que son menos vulnerables a sufrir clonación.
De hecho, al optar por la tarjeta sin chip, Bansefi fue contra lo que han advertido tanto la CNBV como el Banco de México, instituciones que en 2012 pidieron a los bancos migrar a tarjetas de chip o atenerse a la consecuencia de tener que cubrir, sí o sí, los eventuales desfalcos, pues la banda magnética no es segura.
Bansefi no ha explicado por qué tomó esa medida. Y esa es precisamente una de las dudas que tiene la CNBV, que con fecha del 16 de noviembre emitió el oficio 122-2/4208/2017, mediante el cual anuncia a Bansefi que ha decidido realizar una “visita de investigación”, no solo en sus sedes centrales sino también en sus oficinas de Chiapas y Oaxaca.
En una de las partes de ese oficio de diez páginas, la CNBV pide a Bansefi una “justificación detallada del motivo por el que esa institución no utilizó Tarjetas Bancarias con Circuito Integrado para la operación del Programa FONDEN”.
¿Qué más quiere saber la CNBV?:
“Contratos que ampara la compra de tarjetas con chip vigente al mes de noviembre de 2017.
“Contratos que ampara la compra de tarjetas sin chip vigente al mes de noviembre de 2017.
“Proceso de designación del contrato de tarjeta sin chip del cual se desprenden las tarjetas emitidas para el programa FONDEN.
“Las políticas y criterios para la selección de los proveedores de servicios.
“Base de datos del total de tarjetas emitidas para el programa FONDEN.
“Detalle de transacciones realizadas por cada una de las tarjetas.
“Detalle de aplicación a cuentas de tarjetahabientes de dispersión del programa FONDEN y operaciones de compra y retiros de efectivo”.
El oficio está firmado por Anselmo Moctezuma Martínez, director general de Supervisión de
Banca de Desarrollo y Entidades de Fomento; el ingeniero Javier Montaño García, director general de Supervisión de Riesgo Operacional y Tecnológico, y el ingeniero Federico Borrego Merodio, director general de Supervisión de Participantes en Redes, quien por cierto trabajó previamente en Bansefi.
Amparados en el artículo 86 de la Circular Única de Bancos, los de la CNBV seguro querrán saber qué mecanismos estableció Bansefi “para la identificación y resolución” de actos que pudieran generar riesgos derivados de la “comisión de hechos, actos u operaciones fraudulentas a través de medios tecnológicos”.
Las tarjetas de banda magnética de Bansefi al banquillo.