El Financiero.-
El año que le resta a la presente administración es suficiente para avanzar en las seis prioridades del país y que están en manos del Ejecutivo.
Según la Confederación Patronal de la República Mexicana (COPARMEX), los retos del presidente todavía son la economía, la política hacendaria, la política social, la política de justicia y la seguridad, el combate a la corrupción y la educación y no el proceso electoral, además de que ha cumplido apenas con el 40 por ciento de sus compromisos firmados durante su campaña.
“Permanecen inconclusas y en algunos casos desatendidas, las acciones necesarias para el cumplimiento de 106 de los 266 compromisos que el Presidente de la República firmó ante Notario Público durante la campaña presidencial de 2012. Esto significa que solo se han cumplido el 40 por ciento de dichos compromisos, y que 6 de cada 10 promesas de gestión, no han sido honradas en los hechos”, señala la Coparmex en su comentario semanal.
Su dirigente, Gustavo de Hoyos Walther, expone que la magnitud del reto que tiene el Poder Ejecutivo para cumplir con los compromisos que formuló, sería necesario concluir más de treinta proyectos de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, doce de la Secretaría de Educación Pública, y dieciséis en materia de Salud en los estados.
“Desafortunadamente, hay signos de que las prioridades se están enfocando a la atención de la coyuntura electoral. La Coparmex demanda que hasta el último día de su gestión, los funcionarios del Gobierno Federal, desde el Presidente de la República hasta los servidores públicos de menor jerarquía, cumplan a cabalidad con sus funciones”, señala en su comentario.
El líder del sindicato patronal enumeró seis retos para los que el poder Ejecutivo tiene facultades antes de que concluya su administración en diciembre de 2018. En materia económica, debe presentar ya al Congreso de la Unión, la Iniciativa de Ley General de Mejora Regulatoria para el Fortalecimiento de la Competencia y la Competitividad y debe hacer cumplir el Acuerdo Presidencial de desregulación “2 x 1”.
Desde Los Pinos se debe impulsar la creación de un Consejo Fiscal Independiente con mandato formal ya que ayudaría a dar certidumbre en el largo plazo, a la estabilidad macroeconómica del país y discutir una reforma fiscal.
“La reforma fiscal para #Fortalecer a México, debe contener una reducción del Impuesto sobre la Renta a cargo de las empresas, mediante la reducción gradual de un punto porcentual por año de este impuesto, alcanzando el nivel promedio de los países de la OCDE, que es del 24.66 por ciento.
Para fortalecer las clases medias y sus niveles de bienestar, es trascendental reducir el ISR para quienes perciben ingresos menores a 10 mil pesos, y restablecer la deducibilidad al 100 por ciento de las prestaciones laborales, para que más y más empresas puedan conferirlas en forma creciente a sus trabajadores”, reiteró.
En materia de política social es imperante conformar el Padrón Único de Programas Sociales, construir un Registro Nacional de Beneficiarios de Programas Sociales basado en una Cédula de Identificación Personal y evitar la utilización ilegítima de los programas de la Secretaría de Desarrollo Social.
Atacar el problema de la violencia requiere reestructurar la Comisión Nacional de Seguridad (CNS) para descentralizarla y proveerle de mayores facultades operativas. La Coparmex considera que el país debe evolucionar para contar con las Fiscalía General de la República verdaderamente autónoma y respetuosa de los derechos humanos.
Para el combate a la corrupción, el Ejecutivo debe dar facultades al Consejo de Participación Ciudadana del Sistema Nacional Anticorrupción, y fortalecerlo con el suministro de los recursos financieros, materiales y humanos.
Finalmente, en materia educativa, la confederación patronal señala la necesidad de que el Presidente del país de a conocer los avances en las entidades federativas en materia de evaluación de alumnos y docentes, y trasparentar el avance del Sistema de Información y Gestión Educativa.