Proceso.
Las organizaciones Mexicanos en Exilio, Otros Dreams en Acción, Border Network for Human Rights y Border Dreamers Alliance, radicados en El Paso, Texas, Estados Unidos, se sumaron a la condena de aprobación de la Ley de Seguridad Interior.
En un comunicado, aseguraron que esta legislación autoriza al Ejército Mexicano a ser la policía de toda la nación.
“Será un Ejército con mayor poder, pero con menos supervisión y transparencia, aumentando la amenaza de los derechos humanos y libertad de los ciudadanos”, señalan.
Alfredo Holguín, presidente de Mexicanos en Exilio, así como Gabriela Castaneda, representante de Border Network for Human Rights, señalaron que su manifestación de condena es en apoyo a la oposición de las Naciones Unidas (ONU), la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) y Amnistía Internacional (AI).
Además de oponerse a que la militarización nacional avance, exigieron “una investigación de los miles de desaparecidos, asesinatos y violaciones de derechos humanos que han ocurrido en la última década en manos precisamente del Ejército”.
Añadieron: “Aquí, en la frontera, vimos la tragedia de un programa similar cuando el expresidente Felipe Calderón firmó Operación Conjunto Chihuahua en el 2008. La presencia del Ejército Mexicano en Ciudad Juárez provocó que esta ciudad fuera conocida mundialmente como la ciudad más peligrosa del mundo, debido a las altas cifras de desapariciones, asesinatos, casos de tortura y violaciones de derechos humanos en contra de activistas, periodistas y cualquier persona quien alzo voz en oposición”.
Los inconformes consideraron que la nueva Ley de Seguridad Interior expandiría “Operación Conjunto Chihuahua” para ser un programa nacional.
Recordaron que desde el 2006, cuando el gobierno mexicano desplegó al Ejército en el país, más de 30 mil personas han sido desaparecidas, ha habido más de 100 mil asesinatos y más de 10 mil quejas de violaciones de derechos humanos han sido reportadas responsabilizando a elementos castrenses.
Un ejemplo
A causa del aumento de violencia en México, Mexicanos en Exilio fue formado por las víctimas forzadas a pedir asilo político en Estados Unidos.
Ese fue el caso de la familia Alvarado, cuando tres familiares: Nitza Paola Alvarado Espinoza, José Ángel Alvarado Herrera y Roció Irene Alvarado Reyes fueron tomados por la fuerza por elementos del Ejército en Benito Juárez, Chihuahua, el 29 de diciembre del 2009. Los tres siguen desaparecidos y los responsables continúan sin ser castigados.
“La mayoría de nuestras familias han sido víctimas de alguna desaparición, asesinato o abuso en manos del Ejército Mexicano”, recriminaron los críticos.
Mencionaron que miembros de Otros Dreams en Acción también han sido objetivo del crimen organizado y perseguidos por la policía:
“Claramente, esta ley hará poco para dirigir la violencia e inseguridad en la cual nuestras familias viven diariamente en México. Además, compromete el derecho de la libertad de expresión y protesta en nuestro país, a pesar de que son partes fundamentales para crear mejores condiciones para las familias transnacionales que son deportadas y regresadas al país”.
Apoyados por integrantes de la familia Alvarado, consideraron evidente que con esta ley el número de violaciones a los derechos humanos aumentarán en México como ocurrió en Ciudad Juárez en el 2008. De empeorar la situación en México, aseguraron que muchos de nuevo buscarán refugio en Estados Unidos.
“Desafortunadamente, con la administración de Trump la mayoría de estos individuos y familias que buscan seguridad en Estados Unidos enfrentan meses de encarcelamiento en centros de detención con condiciones inhumanas. La deportación de ciudadanos mexicanos inocentes en nuestro país solo los está forzando a regresar a su país, donde la violencia, impunidad y corrupción dominan”.
Mexicanos en Exilio se formó en 2008, con la misión de brindar apoyo a los mexicanos que tuvieron que huir del país al ser victimizados por el crimen organizado y las corporaciones de seguridad: “Continuamos en la búsqueda de justicia y de crear conciencia de la corrupción que se vive en México”.
Otros Dreams en Acción (ODA), representados por la codirectora Maggie Loredo, es una organización binacional con sede en México, dedicada al apoyo mutuo y a la acción política por y para quienes vivieron en Estados Unidos, fueron deportados y ahora se encuentran en México, sufriendo la amenaza de la deportación de algún miembro de la familia.
The Border Network for Human Rights, fundado en 1998, es uno de los líderes de defensa de derechos humanos y reforma migratoria localizada en la frontera de Estados Unidos/México. BNHR tiene más de siete mil miembros en el oeste de Texas y sur de Nuevo México.