La Jornada.
El secretario de Finanzas del Partido de la Revolución Democrática (PRD), Manuel Cifuentes, informó que durante este año estuvieron muy afectados por el pago de multas al Instituto Nacional Electoral (INE), lo que provocó que de julio a octubre recibieran mensualmente la mitad de prerrogativas (19 de millones de pesos), monto incluso por debajo del pago requerido para nómina, la cual oscila en 22 millones.
Señaló que, por ello, la dirigencia encabezada por Alejandra Barrales determinó dejar de rentar el edificio de Benjamín Franklin, al cual retornaron de manera paulatina la semana anterior, debido a que recibirán completos los recursos públicos para las elecciones.
Explicó que el sucesor de Barrales, Manuel Granados, optó por regresar al inmueble –al paso de unos cuantos días– para tener unas oficinas holgadas, presentables, dignas y dar cabida a los integrantes del partido y trabajadores, al constatar que en el edificio histórico de Monterrey 50, donde se instalaría la sede nacional, no había espacio para todos. De continuar con el traslado del Comité Ejecutivo Nacional, estaríamos totalmente hacinados, dijo.
Cifuentes agregó que las multas aplicadas por el INE, por alrededor de 120 millones de pesos, le dieron al traste al partido. Casi nos paralizó la de 2015, 73 millones de pesos, y que el INE dividió en cuatro mensualidades, con lo que apenas nos alcanzaba para la nómina.
Indicó que a lo anterior se añadieron gastos por el sismo del 19 de septiembre, aunque el edificio no tuvo daños estructurales.
Señaló que pese a la situación, terminan el año sin deberle absolutamente a nadie. Al INE le han pagado, de 2016 a 2017, aproximadamente 210 millones de pesos, y faltarían como 60 millones, pero ese pago, explicó, depende de cómo lo programe el instituto.
El secretario de Finanzas del PRD dijo que negociaban con el arrendador del edificio de Benjamín Franklin que no nos cobre aproximadamente entre dos y tres meses, en tanto renuevan el contrato.
