El País.
Ciudad de México. El azote del Ártico se empezó a sentir con fuerza este jueves el Este de Estados Unidos. El temporal de frío extremo que comenzó hace unos días por Canadá, y probablemente ocupará dos tercios de territorio estadounidense, ya ha empezado a dejar temperaturas mínimas registradas a estas alturas del año. La ciudad de Washington se despertó con la mañana más gélida para un diciembre de los últimos 10 años, también se exploraron los mínimos en Detroit o Boston, y en algunas zonas de Pensilvania no habían visto tanta nieve en la historia.
Los servicios de meteorología advierten de que lo más duro del temporal llegará entre el domingo, 31 de diciembre, y el lunes, 1 de enero. En Nueva York, que en Nochevieja se llena de turistas deseosos de recibir el año nuevo en Times Square, esperan que la temperatura llegue a los -12 grados centígrados. De momento, este jueves, ya bordeaba la zona de los -10. En Washington, ha oscilado entre los -4 y los -6. Y en sitios como Dakota del Norte se ha llegado a los -26.
El temporal ha servido a Donald Trump para mofarse del calentamiento global, fenómeno que ha cuestionado en múltiples ocasiones. Esta tarde, en su cuenta de Twitter, ha espetado: “En el este, podría haber la Nochevieja más FRÍA registrada. Quizá nos vendría bien un poco de ese calentamiento global del que nuestro país, pero no otros países, iba a pagar billones de dólares por protegerse. ¡Tápense!”, escribió.
El presidente americano se refería al Pacto de París contra el calentamiento global, que implicaba un desembolso para países como EE UU, y del que Trump decidió retirarse el pasado mes de junio por considerarlo perjudicial para los intereses estadounidenses.
Una de las zonas donde más se ha hecho notar la ola de frío extremo es en Pensilvania. La ciudad de Erie ha acumulado más de 165 centímetros desde el día de Navidad. La nevada superó los 85 centímetros solo en el día 25. El gobernador del Estado, Tom Wolf, anunció que la Guardia Nacional estaba “proporcionando vehículos militares todoterreno de alto rendimiento para ayudar a las agencias locales con la emergencia médica y la respuesta de la policía”.
En Ontario, Canadá, el temporal ha explorado la zona de los -40 grados. “Tenemos que volver a 1993 para ver este tiempo en las provincias de Ontario o Quebec”, advierte el meteorólogo Alexandre Parent, ” y eso sin considerar el factor viento”. Con estas temperaturas glaciales, los riesgos de hipotermia y de sabañones son severos y elevados, y con un enfriamiento eólico cercano a los -35 grados, la piel expuesta se puede congelar en menos de 10 minutos, advirtió el ministerio de Salud, según AFP.