La Jornada.
Ciudad de México. Después de amenazar a millones de inmigrantes desde que llegó a la Casa Blanca, el presidente Donald Trump ofreció este martes un acuerdo de amor
para los dreamers e incluso para 11 millones de indocumentados, pero sólo a cambio de frenar el ingreso de sus familiares y la construcción del muro.
El día empezó con una sorpresa. En una reunión de legisladores republicanos y demócratas con el presidente sobre la política de migración, el magnate abrió la sesión –que era a puerta cerrada–, a los medios por casi una hora, para que fueran testigos de cómo apremió a los congresistas a impulsar un remedio para los dreamers, al que bautizó como un proyecto de ley de amor
.
El presidente dijo que era posible que se llegara a un acuerdo legislativo para resolver el problema de los 700 mil dreamers, quienes ingresaron al país sin documentos siendo menores de edad, y que fueron beneficiados con una orden ejecutiva de Barack Obama (conocida como DACA) que Trump anuló.
El programa termina el 5 de marzo –aproximadamente 122 permisos temporales se vencerán cada día hasta entonces– y Trump ha dicho que corresponde al Congreso resolver el asunto. Pero reiteró su posición de que apoyaría esto sólo a cambio de financiamiento inicial para un muro fronterizo (para el cual ya solicitó 18 mil millones de dólares) y nuevas medidas para limitar ciertas políticas de inmigración, sobre todo la que da prioridad a familiares de inmigrantes legalizados. Para asegurarlo, necesitamos un muro
, insistió. Sin embargo, en las pláticas a puerta cerrada poco después, legisladores indicaron que por primera vez Trump medió sobre su demanda por un muro físico a lo largo de toda la frontera (algo que ya habían indicado sus subordinados hace meses, pero no él), aceptando el uso de tecnología en lugar de barreras en algunas partes.
A la vez, aun más sorprendente, Trump abrió la posibilidad de una reforma migratoria integral que se podría empezar a negociar la próxima tarde
después de llegar a un acuerdo sobre los dreamers y el muro, y la cual aparentemente abordaría el destino de los 11 millones de indocumentados en el país –algo que no se ha logrado en más de dos décadas. Hasta ofreció aguantar el fuego
político de sectores conservadores antimigrantes para aquellos legisladores que se atrevieran a considerar una reforma. Les comentó: ustedes no están tan lejos de una reforma migratoria integral
.
Casi de inmediato, comentaristas ultraconservadores y directores de organizaciones antimigrantes expresaron su disgusto por estos comentarios. Si Trump capitula ante los demócratas y fracasa en cumplir con sus promesas de campaña sobre migración, ya no habrá más promesas que ofrecer para los republicanos en el futuro, porque las bases infligirán una política de tierra arrasada en las elecciones intermedias
este año, amenazó Bob Dane, director de la Federación Americana para la Reforma Migratoria, una de las principales organizaciones antimigrantes, en declaraciones al Washington Post.
Aunque se prometió que continuarán las negociaciones bipartidistas, por el momento no hay mucho que indique un acuerdo inminente sobre migración.
Algunos especulan que Trump abrió la puerta a los medios más bien para que atestiguaran cómo está en control, atento y alerta –y no loco– después de varios días en que un libro sobre su presidencia nutrió especulaciones sobre su salud mental y su capacidad para estar al mando del país más poderoso de la historia mundial.
Hablando de amor e inmigrantes, el famoso alguacil Joe Arpaio, del condado de Maricopa, en Arizona, símbolo y héroe del movimiento antimigrante, feroz promotor de Trump durante la campaña y beneficiado por el primer perdón presidencial por su delito de desacato de una orden judicial por arrestar a personas bajo sospecha de que eran indocumentados, anunció que se lanzará como candidato al Senado federal. Trump aún no ha comentado nada sobre su cuate.
Y hablando de pasiones amorosas, se anunció que Bannon, ex íntimo asesor y estratega político de Trump durante la recta final en la campaña y el primer semestre en la Casa Blanca, dejará su puesto como presidente ejecutivo de Breitbart News. Esto, como consecuencia de que no logró superar el conflicto desatado después de que fue citado en el libro Fuego y Furia, de Michael Wolff, en el cual criticó al hijo del presidente y cuestionó la salud mental de su ex jefe. Eso llevó a que Trump lo excomulgara y con ello, algunos de los patrocinadores claves, como la familia multimillonaria Mercer, le retiraron su apoyo.
Como todos los días, la gran pugna política sobre la investigación de la injerencia rusa en las elecciones estadunidenses continuó este martes, cuando la senadora demócrata Dianne Feinstein, rompiendo el protocolo del Senado, difundió al público el testimonio a puerta cerrada ante el Comité Judicial de Glenn Simpson, director del Fusion GPS, agencia privada que elaboró el famoso dossier político sobre Trump para contrincantes republicanos y demócratas del entonces candidato durante la contienda electoral de 2016, y que entre otras cosas reveló alegaciones de contactos entre la campaña y el gobierno ruso.
De hecho, según el testimonio, el ex agente de inteligencia británica Christopher Steele, autor del dossier,fue el que llevó evidencia a la FBI en el verano de 2016 de lo que llamó conspiración de cooperación
entre agentes rusos y la campaña de Trump, al preocuparse de posible actividad cibernética criminal de los rusos y la posibilidad de un asunto de seguridad sobre si un candidato presidencial estaba siendo chantajeado. Además, se reveló que Steele sabía que una fuente dentro de la campaña de Trump estaba reportando estas mismas preocupaciones a la FBI.
Por otro lado, el proclamado campeón de los trabajadores, pero también magnate multimillonario, participará en la reunión más emblemática de los ricos del mundo, el Foro Económico Mundial anual en Davos, Suiza, confirmó la Casa Blanca.
Y hablando del mundo de las altas finanzas, la empresa del yerno y asesor presidencial, Jared Kushner, está bajo investigación preliminar de autoridades financieras por un posible negocio de visas a cambio de inversiones, publicó el Wall Street Journal. Por separado, el New York Times reportó sobre inversiones de más de 30 millones de dólares para la empresa de bienes raíces de la familia Kushner provenientes de empresas israelíes, provocando interrogantes sobre conflicto de interés y posibles violaciones de normas éticas del encargado, entre otras cosas, de promover la negociación de un acuerdo de paz en Medio Oriente.
Finalmente, ante la explosión de especulaciones sobre si Oprah Winfrey, la famosa conductora de televisión, actriz, productora, directora editorial y más, podría postularse para la presidencia después de su discurso en los Globos de Oro, Trump comentó: me gusta Oprah, no creo que se lance
. Para algunos, la ironía es que a estas alturas Estados Unidos está fascinado con la idea de que una personalidad de la televisión con nula experiencia política sea una respuesta posible a… otra figura de televisión sin ninguna experiencia política previa.