La Jornada.
Ciudad de México. La inflación medida a través del Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) se empezó a desacelerar y registró en la primera quincena de marzo de 2018 un crecimiento de 0.29 por ciento frente a la quincena inmediata anterior, informó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
De esta manera se alcanzó una tasa de inflación anual de 5.17 por ciento, que se compara con la del año anterior de 5.29 por ciento, y de manera quincenal se redujo contra 0.35 por ciento de igual periodo del año pasado.
Las alzas fueron impulsadas por los incrementos en los precios del jitomate, limón, gasolinas y transporte aéreo.
Estas alzas fueron parcialmente compensadas por decrementos en el periodo previo del gas LP, papa y nopales, entre otros.
El índice de precios subyacente presentó un aumento de 0.24 por ciento quincenal y de 4.15 por ciento anual; por su parte, el índice de precios no subyacente se incrementó 0.46 por ciento, obteniendo así una variación anual de 8.21 por ciento.
Al interior del índice de precios subyacente, se observó que los precios de las mercancías se elevaron 0.15 por ciento y los de los servicios 0.31 por ciento, quincenal.
Dentro del índice de precios no subyacente, los precios de los productos agropecuarios reportaron un alza de 0.56 por ciento, al mismo tiempo que los de los energéticos y tarifas autorizadas por el gobierno subieron 0.41 por ciento, quincenal.
