Notimex
Ciudad de México. La Patrulla Fronteriza de Estados Unidos comenzó la construcción hoy de 32 kilómetros de valla fronteriza en el área de Santa Teresa, Nuevo México, al oeste de El Paso. Con esta estructura, que reemplazarán barreras de vehículos, se busca impedir el cruce de indocumentados por la zona.
“El presidente ha iniciado su proyecto. La construcción comienza hoy”, dijo Aaron Hull, jefe de la Patrulla Fronteriza en El Paso, en conferencia de prensa previa a la ceremonia de colocación de la primera piedra.
El periodista Robert Holguin del canal KFOX14 tuiteó algunas fotos del evento dirigido por jefe de Sector de la Patrulla Fronteriza Aaron Hull, en Santa Teresa, Nuevo México.
A pesar de las declaraciones de Hull, este proyecto en específico no se parece a ninguno de los prototipos del muro fronterizo contemplado en los planes del presidente estadounidense, informó Notimex.
Se trata de la construcción de una reja de barrotes de acero (bollard wall) que tendrá una altura de 5.4 metros, lo que dificulta que sea escalada. La valla estará encajada en un cimiento de dos metros bajo tierra.
El contrato para la construcción de este proyecto es de 73 millones de dólares y fue asignado en febrero pasado a una compañía de Montana.
El 13 de marzo, Donald Trump realizó una breve visita a la zona fronteriza de Otay Mesa, en San Diego, para examinar 8 tipo de prototipos de muro, una de sus más fervientes promesa de campaña contra el paso de inmigrantes a EU.
Los prototipos que revisó Donald Trump en San Diego son una mezcla de concreto y vallas metálicas, mientras que la nueva estructura es una especie de reja.
“Este cercado será duradero y va a estar aquí durante mucho tiempo. Va a ser más difícil pasar, más difícil el tratar de pasar por debajo y va a serles más difícil a los entrantes el llegar arriba y saltarlo”, dijo Hull.
“Va a detener todo, con excepción de los entrantes ilegales más determinados. Se va a hacer más difícil para los contrabandistas y criminales fronterizos el moverse entre los dos países. No nos equivoquemos, esta valla va a detener la inmigración ilegal”, aseguró.
El jefe de la Patrulla Fronteriza en El Paso dijo que la estructura será similar al tramo de dos kilómetros construido por esta misma institución el año pasado en la frontera de Sunland Park, Nuevo México.
Grupos ecologistas interpusieron en marzo pasado una demanda en contra de la administración Trump, en la que objetan su facultad de ignorar 25 leyes ambientales a fin de acelerar la construcción de la valla en el área de Santa Teresa.
La demanda, pendiente ante la Corte Federal, sostiene que el gobierno federal no tiene la autoridad para anular leyes que protegen el aire limpio, el agua, las tierras públicas y la vida silvestre en las zonas fronterizas.
Sobre el aspecto ecológico, el jefe de la Patrulla Fronteriza de El Paso dijo que se toman “muy en serio” el impacto ambiental de una barrera fronteriza, pero insinuó que la migración contamina más que la valla cuando deja basura que contamina por años.