El Universal.
Ciudad de México. A la madre de uno de los seis jóvenes desaparecidos en la Cuenca del Papaloapan le pidieron un rescate de 3 millones de pesos, según se desprende de una llamada telefónica, con origen en Tierra Blanca, Veracruz.
Este es otro de los indicios —además de testimonios de personas de San Miguel Soyaltepec—, con los que cuenta la fiscalía estatal para ratificar que tiene sólidos argumentos a fin de aseverar que los cinco jóvenes de Tlaxcala y uno de Oaxaca tuvieron su último rastro en tierras veracruzanas.
La última llamada telefónica se realizó el 8 de abril, a las 17:08 horas, a la señora Jaquelina M. P., proveniente de un joven. Le dicen tener a su hijo Jonathan y que quieren 3 millones de pesos por el rescate.
Tras ello, no hubo más comunicación con las seis víctimas. Tres, según las pesquisas, fueron vistos el 4 de abril y los otros tres, el 6 de abril. Los dos vehículos en los que viajaban aparecieron calcinados el 24 de abril en la carretera colindante con Veracruz.
El pasado lunes, el vicefiscal en la Cuenca, Gustavo Carlos Zúñiga, acudió a Xalapa, Veracruz, para refrendar lazos de colaboración con la Fiscalía General, que encabeza Jorge Winckler, pero él se negó a recibirlos.
El fiscal veracruzano es originario de Salina Cruz, Oaxaca, y su padre es el notario público número 35, Jorge Winckler Yessin.
Winckler Ortiz asumió el cargo en 2016; sin embargo, según su cédula profesional, 3810136, expedida en 2015, en ese entonces apenas tenía dos años de experiencia en la abogacía. Es licenciado en Derecho por la Universidad Nacional Autónoma de México, obtuvo el grado de maestro en Derecho Procesal Penal por el Centro Universitario Latino Veracruz y cuenta con la maestría en Derecho Corporativo, impartida por la Escuela Libre de Derecho de Veracruz.