Oaxaca de Juárez. El inexperto ex Secretario de Desarrollo Social y Humano prefirió destinar casi 8 millones de pesos en 3 spots para su promoción personal que combatir la grave pobreza y marginación en Oaxaca.
Oaxaca es uno de los estados más pobres de México y de Latinoamérica. La SEDESOH cuenta con un presupuesto multimillonario de partidas presupuestales federales y estatales para la erradicación de este terrible mal. México atiende a Oaxaca, pero Oaxaca atiende a los intereses personales de unos cuantos. Cuando seguir en el poder es la única meta personal de quienes nos gobiernan, en vez de cumplir con la vocación de servicio social – necesaria en los servidores públicos-, las cosas no avanzan y la situación empeora.
Esta situación se dió con el ex secretario “estrella” del gobernador Alejandro Murat, Raúl Bolaños Cacho-Cué, quien bien es sabido es el “elegido” por la dinastía saqueadora de Oaxaca para darle continuidad a un proyecto de décadas de desvíos millonarios, corrupción e impunidad. Se prefirió destinar millones de pesos en spots publicitarios para beneficio personal en vez de destinar los recursos a cumplir las metas de su función, atender las necesidades de los oaxaqueños. Este caso de desvío y corrupción, no es el único.
Segun la licitación Pública Estatal LPE-SA-SD-0031-12/2017, relativa a la “CONTRATACIÓN DE LOS SERVICIOS PARA LA PRODUCCIÓN DE DIVERSOS VIDEOS INSTITUCIONALES EN MATERIA DE DESARROLLO SOCIAL, RELATIVOS AL DESARROLLO E IMPLEMENTACIÓN DE ESTRATEGIAS DE POSICIONAMIENTO DE LOS PROGRAMAS Y ACTIVIDADES DE LA SECRETARÍA DE DESARROLLO SOCIAL Y HUMANO DEL ESTADO DE OAXACA”; se pagó a la empresa “Diseño y Publicidad Hagnez S.A de C.V”, única empresa que se presentó a hacer la oferta y cuyo giro de producción y postproducción no es una actividad a la que la compañía se dedique, 3 spots titulados “Logros en materia de desarrollo social”, “Política Social en Oaxaca” y “Programa Juntos” para hacer notar el breve y casi desapercibido paso por la función pública de Raúl Bolaños Cacho-Cúe con el fin de posicionar su imagen para su candidatura al Senado, la cual ya es fallida.
El Gobierno del Estado pagó la desproporcionada cantidad de casi 8 millones de pesos -de dinero de los oaxaqueños- por los video. Cada minuto de video realizado tuvo un costo final de 322 mil pesos, cada segundo de video costó 5 mil 300 pesos, un verdadero insulto, por decir lo menos. Oaxaca, el segundo estado más pobre del país, invierte sus recursos en videos carísimos por orden de la Secretaría encargada de combatir la pobreza.
A su salida de la Secretaría se impuso como delegado de Desarrollo Social en la entidad a su primo, Gabriel Cué Navarro. Esto deja de ser sospechoso para convertirse en ridículo cinismo.
Desviar los recursos destinados para el combate de la pobreza en Oaxaca hacia actos tan frívolos como el intentar hacer crecer la imagen política de alguien que no hizo nada por el estado, es una irresponsabilidad y es un delito. Son responsables no sólo Raúl Bolaños Cacho-Cué sino también el Gobernador, el Secretario de Finanzas y el Secretario de Administración. Utilizar recursos públicos para cometer actos electorales anticipados es algo que debería investigarse por el Contralor del Estado, el Fiscal Anticorrupción y todos los miembros del Sistema Estatal de Combate a la Corrupción.