Oaxaca de Juárez. Entre llaves, pinzas, desarmadores, tubos, sopletes y otras herramientas, un grupo de 21 mujeres llegan a la recta final de su capacitación en plomería básica y así, abrir brecha laboral en igualdad en un oficio que siempre se creyó era de predominio masculino.
Estas mujeres forman parte de la primera generación de plomeras en Oaxaca, que fueron beneficiadas con la colaboración lograda por la Secretaría de Desarrollo Social y Humano (Sedesoh) con Petróleos Mexicanos, que donó una Unidad Móvil de Capacitación al Gobierno del Estado.
En esta acción para el empoderamiento económico y laboral de las mujeres en vulnerabilidad, participaron activamente la Secretaría de la Mujer Oaxaqueña (SMO), el Instituto de Capacitación y Productividad para el Trabajo (Icapet) y la Delegación en Oaxaca del Servicio Nacional del Empleo (SNE).
“Ser plomera es un orgullo”
“Ser mujer y ser plomera, es un orgullo”, comenta Itandehui Pérez Canseco, una de las alumnas que participó en este curso con el lema “Rompiendo Estereotipos”.
La joven de 27 años y madre soltera, manifestó sentirse agradecida por los apoyos que tuvieron por parte de las diversas instancias del Gobierno del Estado, para lograr concluir con éxito esta capacitación desde recibir el material y herramientas, hasta el apoyo con el cuidado de sus hijos.
“Uno de mis principales contratiempos para poder trabajar es el tiempo y con quién dejar a mi bebé, aquí he encontrado ese apoyo. Además, el respaldo económico que te pagan por esas horas que vienes, por algo que nos beneficiará económicamente”, manifestó la joven originaria de Nativitas, agencia de la Villa de Etla.
Al reafirmar que ser mujer no es un impedimento para desempeñar trabajos que tradicionalmente son hechos por hombres, Itandehui Pérez relató: “mi hijo un día me vio con guantes, gafas y un soplete, y me preguntó: ¿qué es eso mamá?, ¿y tú por qué juegas con fuego?, le expliqué que plomera será mi trabajo, yo me siento feliz de poder ser una guía para él, que ve a una mamá fuerte e independiente”.
El instructor del Icapet de Magdalena Etla, José Alberto Ramos Moreno habló sobre la experiencia de trabajar con las 21 mujeres que se encuentran concluyendo con éxito este curso, “fue un reto pensé al principio, pero al irlas tratando me di cuenta que ellas saben lo que quieren, pretenden sobresalir, es una experiencia gratificante”, finalizó.
