La Jornada.
Ciudad de México. España y otros cinco países europeos llegaron hoy a un acuerdo para acoger a los 141 migrantes que viajan a bordo del barco de rescate Aquarius, que desde el viernes reclama autorización para atracar en un puerto seguro.
Según confirmó el Gobierno español, España acogerá a 60 de los migrantes. El Ejecutivo de Pedro Sánchez destacó que el acuerdo fue coordinado por Madrid y que es “la primera operación de este tipo de distribución de migrantes entre varios estados europeos”.
Previamente, el presidente de la Generalitat (gobierno catalán), Quim Torra, puso varios puertos de Cataluña a disposición del Aquarius, la embarcación que viaja con más de 140 inmigrantes a bordo.
“He pedido a Puertos de la Generalitat que acojamos al barco Aquarius en Palamós, Vilanova o Sant Carles de la Ràpita, puertos bajo la autoridad del Gobierno de Cataluña, para poder desembarcar a las personas rescatadas con todas las garantías”, publicó Torra en su cuenta de Twitter al agregar que “Cataluña siempre será tierra de acogida”.
La competencia de estos tres puertos, que corresponden a las provincias de Girona, Barcelona y Tarragona respectivamente, está traspasada a la Generalitat, que los gestiona a través de la empresa pública Ports de la Generalitat, creada en 1998.
Esta compañía opera en total 19 puertos, tres dársenas pesqueras y cuatro embarcaderos fluviales; sólo los puertos de interés general, como Barcelona y Tarragona, permanecen bajo gestión de las autoridades españolas.
Tras la oferta de Cataluña, también Portugal se ha pronunciado al ofrecer acoger a una parte de los inmigrantes. “Portugal está disponible para acoger a 30 de los 244 migrantes que se hallan a bordo del Aquarius y otras embarcaciones actualmente en Malta”, señaló en un comunicado.
El Aquarius pidió el pasado domingo a varios Gobierno europeos que le asignen un puerto seguro donde poder desembarcar a los 141 inmigrantes que lleva a bordo.
La embarcación rescató a los inmigrantes –entre ellos 73 menores, 67 de los cuales viajan sin acompañamiento de sus progenitores– el pasado viernes en aguas internacionales y fue rechazada ya por las autoridades libias, según informan las ONG Médicos Sin Fronteras y SOS Mediterránee, que operan el ‘Aquarius’.
La mayoría de los inmigrantes proceden de Eritrea y Somalia y tienen pensado solicitar asilo a Europa debido a la frágil situación en sus respectivos países.
Los puertos más cercanos al Aquarius ahora mismo son los de Malta e Italia, que anteriormente anunciaron un cambio en su política, cerrando sus puertos a las embarcaciones de rescate de inmigrantes alegando que sus capacidades están sobrepasadas; en las últimas horas se habla de un posible desembarco en Francia.
El ‘Aquarius’ llegó anteriormente en Valencia el pasado 17 de junio con 630 inmigrantes a bordo, su desembarco fue seguido por el desembarco del Open Arms del 9 de julio en Barcelona con 60 inmigrantes, y del 9 de agosto en Algeciras con 87 inmigrantes, entre otras llegadas irregulares, siendo el episodio más importante el asalto de 600 inmigrantes a la valle fronteriza de Ceuta el pasado 26 de julio.
La llegada de miles de inmigrantes este verano provocó un debate en la sociedad española; los conservadores del Partido Popular y Ciudadanos critican al Gobierno español haber provocado un “efecto llamada” con la acogida del Aquarius y no destinar recursos suficientes a los agentes en las fronteras.