Proceso.
Ciudad de México. “Los pintores, los artistas también tenemos un lado de inventores”, afirmó el reconocido pintor Francisco Toledo al presentar un horno ecológico para la elaboración de totopos en el marco del Día del Maíz Nativo de Oaxaca que fue conmemorado con rituales a la madre tierra y una calenda.
Frente al Instituto de Artes Gráficas de Oaxaca, el artista plástico regaló totopos y presentó junto con el director del estudio de vidrio soplado Xaquixe, Christian Thorton, “una maquina eléctrica de hacer totopos porque la leña se está acabando y la salud de la gente que hace los totopos se viene deteriorando por el calor y el humo”.
Después del terremoto del 7 de septiembre de 2017 y los sismos de 19 y 23 del mismo mes, el pintor considera que puede ser una gran alternativa para continuar con esta actividad que es el sostén de cientos de familias.
Thorton explicó que están buscando financiamiento para el proyecto de hornos ecológicos y sustentables, y por lo pronto llevarán este ejemplo al Istmo de Tehuantepec para capacitar a la gente y medir qué tanto se gasta con luz y qué tanto con leña.
Detalló que el horno ecológico consta de una olla tradicional, ladrillos refractarios, aislante mineral, adobe y paneles solares.
Por su parte, Espacio Estatal en Defensa del Maíz Nativo de Oaxaca conmemoró el Día del Maíz Nativo de Oaxaca con una calenda, un ritual a la madre tierra y consignas en contra de los transgénicos.
“A 36 años de haberse iniciado las políticas neoliberales que han golpeado el campo mexicano, ¡nuestros maíces nativos están vivos! porque los hombres y mujeres campesinas del estado de Oaxaca seguimos sembrando en nuestros campos maíces de diferentes razas y colores que engalanan nuestras casas con comidas que en muchos casos solo se conocen en el lugar donde se realizan.
“Con nuestro milenario sistema de tumba roza y quema, o con el arado egipcio que nos trajeron los españoles se sigue labrando la tierra, aunque recientemente muchos campesinos estamos experimentando con técnicas agroecológicas que nos ayudan a producir sin depender de insumos externos.
“A treinta y seis años de haber impuesto el modelo neoliberal en el campo mexicano, les decimos: ¡No han podido eliminar la diversidad! ¡No han podido eliminar la lógica campesina! ¡Seguimos y seguiremos produciendo para comer a partir de nuestras propias semillas y sistemas de producción!”.
Recordaron que ni la primera revolución verde que trajo maquinaria, semillas híbridas, sistemas de riego y diversos agroquímicos; ni la segunda revolución verde con sus transgénicos y mayor consumo de pesticidas nos han logrado convencer que tenemos que producir bajo la lógica del mercado mundial”.
“Los emisarios de las empresas transnacionales no lograron convencernos de que con sus transgénicos, (que ya son una tecnología caduca), o con sus nuevas biotecnologías (con las que pretenden modificar las semillas y otros organismos vivos) salvarán a la humanidad del hambre. Está más claro que nunca que el problema del hambre no es propiciado por la falta de alimentos, sino que es impulsada por su mala distribución en México y en el mundo”.
Reiteraron su “rechazo a los transgénicos, a las nuevas tecnologías como el CRISPR, la biología sintética y los impulsores genéticos que pretenden contaminar y despojarnos de nuestras semillas, romper nuestros sistemas agrícolas, así como la manera de hacer comunidad”.
Insistieron al próximo presidente, Andrés Manuel López Obrador, que “no queremos a quien usted designó como secretario de agricultura (Víctor Manuel Villalobos) por su pasado deshonesto que solo ha favorecido a las empresas biotecnológicas transnacionales, pero tampoco aceptaremos a cualquiera con ese perfil.
“Si realmente quiere escuchar al pueblo en la definición de la política pública, debe considerar, en primer lugar, la urgencia de transitar hacia la soberanía alimentaria, que parte como lo dice la Vía Campesina de conservar nuestros propios alimentos y culturas”.
En ese sentido también rechazaron las políticas que llevan alimentos a sus comunidades que son ajenos a sus culturas y que solo están propiciando el cambio de regímenes alimenticios para hacerlos dependientes del exterior.
Finalmente destacaron que “hoy celebramos la existencia de nuestros maíces nativos en la cuna que los vio nacer, invitamos a todos los campesinos y campesinas a seguirlos sembrando y consumiendo los productos de la milpa”.
¡No a los transgénicos ni a las nuevas tecnologías que pretenden eliminar las semillas!, puntualizaron.