Oaxaca de Juárez. La Defensoría de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca inició el martes 11 de diciembre último un expediente a petición de los periodistas Flor Hernández Ramos y Virgilio Sánchez León, por la amenaza de muerte que recibieron siete comunicadores mediante un mensaje colectivo enviado al sitio de Facebook de un medio informativo donde uno de estos comunicadores colabora como reportero.
Además, la Defensoría integró en dicho expediente la denuncia formal ante el Ministerio Público que hicieron el mismo 11 de diciembre los comunicadores Ivonne Mateo Ibáñez, Said Hernández, Jaime Guerrero, Álvaro Morales Juárez y Francisco Vásquez Fernández, quienes manifestaron haber recibido por la misma red social idéntica amenaza de muerte. Dicho mensaje anónimo dice en forma literal: “Esta es una segunda advertencia para los que no obedecieron el primer llamado: Francisco Vásques, Virgilio Sánchez, Jaimr Guerrero, Ivón Mateo, Flor Hernández, Said Hernández y alvari morales. Bajenle de huevos porqie no abra tercer llamado”.
Asimismo, este miércoles 12 de diciembre, el organismo defensor facilitó su sede para que los periodistas Hernández Ramos, Mateo Ibáñez, Morales Juárez, Sánchez León y Vásquez Fernández ratificaran la denuncia formal que realizaron en Ciudad Judicial el 11 de diciembre, ahora ante una agente del Ministerio Público estatal que se constituyó en las oficinas centrales de la Defensoría a fin de confirmar las declaraciones de estos comunicadores con respecto a la amenaza de muerte que les fue dirigida en forma colectiva.
La Defensoría expuso que abrió el expediente DDHPO/CA/1037/2018 luego de que los comunicadores Hernández Ramos y Sánchez León presentaron sus respectivas quejas por un mensaje anónimo con amenazas que recibieron el 10 de diciembre actual en el sitio electrónico señalado.
La instancia defensora externó su preocupación ante este caso debido a que México se ha convertido en uno de los países más riesgosos para ejercer el periodismo, pues tan sólo en este año 14 periodistas han sido asesinados en diferentes estados del país. En Oaxaca, el organismo defensor contabiliza que 12 comunicadores han sido ejecutados entre 2014 y 2018. De 2015 a 2018, la instancia pública autónoma registró 258 periodistas agredidos.
El organismo defensor señaló que, ante la amenaza hecha por persona o personas desconocidas contra las y los reporteros, además de abrir el expediente de queja, solicitó la colaboración de la Fiscalía General del estado a fin de que investigue la procedencia de las amenaza dirigidas contra las y los comunicadores y establezca medidas de protección para todos ellos.
Además, la instancia defensora solicitó a la Secretaría estatal de Seguridad Pública salvaguardar la integridad física y psicológica de las y los periodistas amenazados, así como que puedan ejercer su profesión con garantías suficientes para la seguridad en su desempeño y con respeto a su libertad de expresión.
En seguimiento a este caso, la Defensoría solicitó y obtuvo de la Fiscalía General el envío a sus oficinas centrales de una agente del Ministerio Público que ratificó las declaraciones de cinco de los comunicadores amenazados, quienes confirmaron su denuncia formal.
Finalmente, a los cinco periodistas que se apersonaron este miércoles 12 de diciembre a su sede, el organismo defensor les ofreció solicitar su integración al Mecanismo de Protección para Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas dependiente de la Secretaría de Gobernación, ofrecimiento que las y los comunicadores aceptaron.
En lo relativo a este tema, la Defensoría de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca detalló que en 2018 ha solicitado medidas de protección para 18 periodistas en la entidad. El organismo público autónomo detalló que entre las agresiones más recurrentes a comunicadores están las agresiones físicas, la intimidación, el seguimiento intimidatorio, intervenciones telefónicas y vigilancias ilegales, así como las amenazas de muerte.
El organismo autónomo expuso que en los meses de enero, marzo y mayo de este año se presentó un mayor número de agresiones a periodistas, mientras que la región de Valles Centrales y Mixteca son en las que más agresiones se han presentado.
