La Jornada.
Ciudad de México. El ex gobernador de Sonora, Guillermo Padrés Elías lamentó la filtración de un audio de WhatsApp donde gritaba: “Ya estoy libre cabrones, agárrense”, después de su salida del Reclusorio Oriente de la Ciudad de México, el sábado pasado. Aseguró que el mensaje era para sus amigos y que se tornó para una mala interpretación.
“Lo lamento, era algo más personal, para mis amigos, no era para la prensa o para otro, de ninguna manera”, declaró el político panista a su llegada a Sonora después de pasar 26 meses en prisión.
Procedente de Ciudad de México, Padrés Elías llegó al aeropuerto Ignacio L Pesqueira, de Hermosillo, a las 16:15 horas, acompañado de su esposa Iveth Dagnino. Lo recibieron ex funcionarios de la administración 2009-2015, compadres, amigos y familiares para darle la bienvenida con abrazos, aplausos y hasta globos que dejó volar al cielo en señal de libertad.
Guillermo Padrés dijo estar contento y feliz de reunirse con sus familiares y amigos, entre ellos el dirigente estatal del PAN, Ernesto Munro Palacio, el ex titular de Desarrollo Social Javier Neblina y Agustín Rodríguez, ex diputado federal, quien es investigado junto con Padrés por el delito de tortura y privación de la libertas contra Gisela Peraza Villa, la ex empleada doméstica.
Un juez federal permitió al panista seguir su proceso en libertad luego de aceptar como fianza las hipotecas de dos inmuebles de familiares de los Padrés Dagnino para cubrir la garantía de 40 millones de pesos.
Antes de salir de prisión, a Guillermo Padrés le fue colocado un brazalete electrónico en el tobillo izquierdo como parte de las condiciones para que continúe su proceso en libertad, así como el desahogo de las investigaciones por el delito de lavado de dinero, defraudación fiscal y enriquecimiento ilícito.